Desde hace un tiempo tenemos en casa otra de las ediciones de los Minicuentos para ir a dormir, como la de vacas y jirafas que os contaba en esta entrada. En este caso es el de conejos y elefantes (Minicuentos de conejos y elefantes para ir a dormir). Entre los cuentos de este libro se incluye uno llamado como el título de nuestro post, ¿Cómo se hace un arco iris?. En él una elefanta llamada Elena juega a combinar colores para obtener otros diferentes y generar una gama grande de colores como la del arco iris.
A mi hijo le encanta este cuento y casi todas las noches lo leemos y siempre en modo adivinanza. A ver a ver, ¿blanco más rojo igual a? (blanco + rojo=….) y tiene que decir el resultado de la combinación de colores. Aprovechando lo que le gusta adivinar los colores y pintar, decidí proponerle experimentar por si mismo las combinaciones de colores que proponía Elena en el cuento y así jugar nosotros mismos con las pinturas y pinceles como ella.
Los materiales que se necesitan son bien sencillo:
Una hoja grande para pintar.
Un vasito con agua.
Temperas de colores.
Trapito o papel de cocina para secar.
Varios pinceles para las mezclas.
Un delantal para el niño, para evitar que se manche, jajaja.
El uso de temperas y pinceles para él supone coger pintura con el pincel y esparcirla por todo el dibujo del papel o por el papel formando figuras, “estrujando” un poco el pincel para usar toda la pintura del mismo. Así que, lo primero en este caso era enseñarle a hacer pegotes de pintura en el papel usando el pincel y el primer color que fuera a mezclar. Si por ejemplo empezamos con el amarillo, cogemos una buena cantidad en el pincel y ponemos un montoncito en el papel.
Después o cambiamos de pincel o limpiamos el que estamos usando, y pasamos a coger el color a mezclar, en este caso el rojo, de la misma manera, cogiendo un montoncito con el pincel. Y mezclamos en el papel ambos colores.
En este caso, como vio que se le había quedado muy pequeño el circulo, quiso poner más de los colores para hacerlo más grande. Así que limpiamos pinceles y a volver a empezar, amarillo y luego rojo y a mezclar.
Al principio fuimos siguiendo las combinaciones que indicaba el cuento: amarillo y rojo, rojo y azul, blanco y rojo, blanco y negro, etc. Pero luego, con los botes de colores en la mesa, decidió él la combinación de colores a realizar. Primero de dos en dos y luego ya se atrevió incluso a mezclar más de dos. ¡Menudo reto y menuda diversión!, que puede salir de esas mezclas….
El caso es que encima nos ha quedado un papel muy artístico, lleno de colores extraños pero bonitos.
Con ello aprendió también a que no se puede usar un pincel manchado con un color para coger pintura de otro bote, ya que se mancha la pintura y por tanto, se alteraba el color. Así que usando varios pinceles, un bote con agua y un trapito, problema resuelto. Antes de coger el siguiente color, cambio de pincel o lo limpio en el agua y lo seco con el trapo.
La verdad es que es una actividad realmente sencilla, pero estuvimos un buen rato adivinando qué color saldría, descubriendo colores extraños y diferentes y haciendo pegotes de pintura para poder hacer las mezclas en el papel. ¡DIVERTIDÍSIMO!
Esto mismo podéis hacerlo con las temperas como nosotros, con pinceles o con los dedos, acuarelas, agua con colorante y vasitos, incluso algunas ceras de colores te permiten hacerlo, como las pinturas de colores de IKEA que son blandas y pintan muy bien.
¿Les gusta a vuestros peques pintar? ¿Usan los pinceles y las témperas o acuarelas en casa? Si os gustan las manualidades, podéis revisar otras que hemos comentado en este blog, como por ejemplo Decorando con Goma Eva o Actividades con pajitas de colores.
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