No solo echan humo los dispositivos, enviando y recibiendo bytes. Como era de esperar, muchas personas también echan humo al verse en fotos y vídeos en la red de redes.
Curiosamente han empezado las denuncias de hijos a padres por publicar fotos inapropiadas. Claro, publicar fotos de menores no está prohibido expresamente en las redes sociales pero puede tener consecuencias.
Hay que tener especial cuidado con la reputación on-line, con el rastro digital, ‘qué dice internet de mi‘. Nos jugamos mucho.
Recordemos, una vez más, que las imágenes en internet son indelebles. Eliminar una imagen después de publicada no es fácil, sobre todo si se comparte con otras personas. Aunque existe el “derecho al olvido” en internet, que permite solicitar a un buscador que no aparezca cierto enlace, para que fuese efectivo habría que eliminar los enlaces de todos los buscadores del mundo mundial.
La cosa es muy seria. La Constitución Española, en su artículo 18, garantiza el derecho al honor, a la intimidad personal y familiar y a la propia imagen; y en el artículo 10, la dignidad de la persona, los derechos inviolables que le son inherentes, el libre desarrollo de la personalidad.
Evita fotografiar al menor …
Desnudo, aunque el bebé esté para comérselo
Enfadado, con una rabieta o malhumorado
Imágenes que puedan avergonzar cuando sean mayores (disfrazados, haciendo posturas raras, manchados y sucios, …)
Enfermos u hospitalizados
Imágenes en el cuarto de baño
Se trata de no ser la causa de que el menor sea marginado por esa imagen.
Un consejo: ante la duda no publiques esa fotografía en internet.
Por cierto, aprovecho para dar las gracias a Carmen y a María por haberme dejado publicar una foto suya en este post. Sois las mejores.