Aunque en mi entorno sólamente tengo papás treintañeros con niños muy pequeñitos, sí es cierto que cuando me topo con alguna persona cuyo hijo es casi adolescente. Es muy común escuchar siempre mismas expresiones cuando nos encontramos con una madre que esta por entrar a esta etapa con sus hijos. Siempre les asaltan una mezcla de expectación, temor y dudas: ¿Sabré hacerlo bien? ¿Cómo me comunicaré con él? ¿Me extorsionará? ¿Me hará la vida imposible?
Por supuesto, la imaginación es tan libre que muchas veces nos encontramos en hipótesis demasiado 'terroríficas' de lo que luego suele ser la realidad. Nuestro entorno, algo deshumanizado, las noticias, las redes sociales y el uso que hacen los niños de Internet en general, nos conducen a tener una visión muy negativa de lo cómo serán cuando se conviertan en adolescentes.
¿Qué dicen los expertos en este sentido? Calma. La calma es uno de los consejos principales para llevar una vida tranquila con tus hijos, apelar por la serenidad en todos los aspectos es una parte fundamental, no sólo en el físico, sino en momentos muy puntuales. Por ejemplo, si tu hijo percibe en tí una actitud continuamente a la defensiva o temerosa, sólo acentuará más ésa brecha imaginaria entre padres e hijos adolescentes que tienes en la cabeza. Es mucho mejor utilizar la naturalidad, la espontaneidad y la comunicación.
Pero, sobre todo, intenta tener empatía y situarte años atrás, cuando tú sentías todos esos cambios físicos, metabólicos y emocionales y sentías que nadie te entendía. Es el mejor punto de partida para entender a tus hijos adolescentes, pero creo que para cualquier relación humana. Ponerte en el lugar es siempre garantía de un mejor entendimiento que cualquier otro enfoque.
Ahora bien, ¿qué trucos o consejos, así, express, podemos aplicar en el día a día? He recopilado 20 trucos, todos ellos de expertos en Psicología Infantil. Pero además, por si no os es suficiente, os voy a dejar con el vídeo de la experta Amor Hernández, psicóloga gestáltica que muy amablemente ha colaborado con nosotros en relación a cómo tratar a los hijos. ¡Hoy toca, claro, un vídeo sobre adolescentes! Pero no nos adelantemos. Primero los trucos:
- No eleves el tono de voz ni chilles. Aunque te parezca una tontería, con los adolescentes es una de las claves para lograr una comunicación fluida. Su vulnerabilidad les hace ponerse a la defensiva y es mejor hablarles con un tono suave en la medida de lo posible.
-Mírate en ellos y encuéntrate a tí mismo. Viene a decir un poco lo que os comentaba más arriba. Sin empatía no hay comunicación con ellos. Tú fuiste uno de su 'grupo' hace tan sólo unas décadas.
- Utiliza frases que digan lo mismo pero sin herirle, por ejemplo:en vez de decirle ¡eres un desastre, lo tienes todo asqueroso! utiliza ésta: ¡Cuando no ordenas tu cuarto, me molesta y me hace daño, porque te lo pido por favor''. ¿Ves qué cambio? Mientras con la primera, sólo se sentirán atacados, con la segunda estamos apelando a su sentido común y a que sientan que, efectivamente, obraron de una forma no adecuada.
-Acéptale y respira. Estos dos consejos suelen ir juntos. Cuando sientas que no puedes más con él o ella recuerda: no sirve de nada perder los nervios. Respira hondo varias veces y recuerda que tu hijo es fruto de un sinfín de cambios que le 'manejan' de algún modo. Aceptar que es parte de su desarrollo te hará entenderle mejor.
-No fuerces. Muchos padres quieren ir de 'enrrollados' e intentan forzar una comunicación constante con sus hijos, intentando hacer, por ejemplo, planes todo el tiempo. Hay que saber ser equilibrados. Si en toda tu vida hay dos o tres años en los que tu hijo prefiere hacer planes con otras personas, debes aceptarlo como algo natural. Ya volverán a ti :)
Y ahora, unas pautas más 'técnicas' de la mano de la experta psicóloga. :)