En muchas ocasiones hemos hablado del placer de cocinar con los niños. El amor por la cocina es muy importante. Está demostrado que aquellas personas que comen diariamente comida casera elaborada con mimo y dedicación por ellos mismos, tiene una mejor alimentación que aquellos que no prestan atención y que no les gusta preparar la comida.
Indudablemente, una cosa no tiene por qué ser equivalente a la otra, pero si nos gusta cocinar, tenemos la ventaja de poder inculcarle a nuestros hijos con pasión esta tarea. Los niños son auténticas esponjas que absorben con devoción todo aquello que les enseñan los padres. Lo mejor es comenzar con recetas sencillas, que les llame la atención y sobre todo que les apetezcan, es un orgullo saber preparar nuestra propia merienda.
Por eso, hoy os propongo pasar un divertido rato con vuestros hijos y elaborar un rico desayuno o merienda a base de magdalenas rellenas de chocolate. Os aseguro que estas magdalenas gustan tanto a niños, como a adultos, ¡no os las perdáis!
¿Cuál es la receta preferida de tus hijos?