El otro día estuve en casa de una amiga que tiene dos hijos pequeños y para poder disfrutar de nuestro café tuvimos que retirar del sofá las nuevas adquisiciones de los peques de la casa. Seguro que muchas de vosotras estáis agobiadas porque de repente vuestro jarrón favorito ha perdido todo el protagonismo y lo ha cedido al carrito del muñeco.
Por eso, creo que esta época es un buen momento para donar juguetes que sus hijos ya no usan y, además, será también una oportunidad para que los niños aprendan a valorar sus nuevos regalos, algo que nos preocupa a todos.
Y qué mejor manera de hacer esto que ayudando a los demás, así que la mejor opción es la donación. Durante todo el año, fundaciones como Cáritas y Cruz Roja recogen juguetes, ropa.. La Fundación Remar, por ejemplo, envía contenedores de ayuda humanitaria a países subdesarrollados. Para ello piden todo tipo de materiales: juguetes, material escolar, ropa, carros de bebé..Por lo que se trata de una buena opción.
De la misma manera, podéis acudir a iglesias y hospitales que también suelen aceptar donaciones. Informaros si en vuestra localidad o en alguna cercana existe algún centro o alguna casa de acogida, pues recibirán con los brazos abiertos cada juguete que les podáis entregar. Además, en los colegios suelen tener información sobre sitios cercanos a los que os podéis acercar.
Eso sí, los juguetes que entreguéis deberán estar en buen estado. Recordad que acabarán en manos de algún pequeño.
Estas son algunas opciones, ¿tenéis alguna otra alternativa que podáis contarnos?
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