¿Hay alguna diferencia entre los muebles-cambiador para bebés y una simple cajonera? Yo creo que solo se diferencian, y mucho, en el precio. Emprezaré por reconocer que durante mi embarazo me pudo mucho más la cabeza que el corazón y no me volví loca con las compras. Muchas futuras mamis disfrutan tanto buscando el mobiliario, ropitas, etc. ideal para sus bebés que, por muy poco práctico que resulte después, ya les merece la pena el gasto. Pero no es mi caso y, si tampoco es el tuyo, te recomiendo pararte a pensar si esos productos específicos para bebés que nos meten por los ojos no son en realidad artículos cotidianos con algún pequeño cambio. Y ese cambio podemos hacerlo nosotros mismos sin renunciar a que nuestro pequeño tenga un dormitorio de lo más coqueto. A mí me basto con dar una vuelta por Ikea y por Leroy Merlin para conseguir un estupendo mueble-cambiador, con muchísimo espacio de almacenaje, una altura perfecta para que nuestra espalda no sufra, divertido y bastante barato. Todo a partir de la cómoda Hemnes de Ikea. La primera idea que tuve fue comprar la cómoda Malm, ya que había visto en internet cómo varias mamis habían adaptado este modelo de cajonera a la función de cambiador. Pero al verla en la tienda resultó que si elegía la de tres cajones quedaba demasiado baja como para cambiar cómodamente al bebé, mientras que la de cuatro cajones era demasiado alta. Le dimos mucha importancia a la altura porque cambiar a un bebé en una posición incómoda puede ser un suplicio para nuestra espalda. Es una labor que repetireis hasta 10 veces al día. Descartada la Malm por esta razón, nos decidimos por la Hemnes de tres cajones en tinte blanco. La altura (95 centímetros) es perfecta para cualquier persona de estatura media. No tendrás que encorvarte y manejarás con facilidad al chiquitín. Está fabricada en madera de pino macizo por lo que su aspecto es bastante robusto y los tiradores (bastante feos para mi gusto) nos abren todo un mundo de posibilidades para darle nuestro toque personal al mueble de forma muy simple. En mi caso, elegí en Leroy Merlín tres pares distintos de tiradores. Osos, flores y estrellas. Un par para cada cajón que, por cierto, son muy amplios, fáciles de abrir y cerrar, llevan topes y sus medidas se adaptan a las cajas Garnityr si queremos mantener más organizado su interior. Por fin, las medidas de la encimera (108 cm de ancho y 50 cm de fondo) son ideales para poner un cambiador de espuma y una cestita para tener a mano pañales, toallitas, pomadas... Todas las tiendas de bebés ofrecen una amplia gama de textiles para recubrir estos accesorios, aunque también pueden encontrarse on-line incluso a mejor precio. En mi caso, elegí un diseño en blanco y beige de la marca Petit Praia para la toalla que envuelve el cambiador y la cestita, muy útil porque dispone de compartimentos laterales en los que meter peines, el termómetro, tubitos de suero, cremas... Repetí el mismo textil en la colcha y el protector de la cunita para darles unidad a los distintos elementos de la habitación.
Mi peque ya tiene tres meses y estoy encantada con esta solución de cambiador. Tiene la altura ideal, una capacidad de almacenaje enorme, me permite tener todo al alcance de la mano y me ahorré bastante dinero. ¿Se puede pedir más?