¡Buenos días! Volvemos una semana más con el resumen de actividades y noticias de los últimos siete días. La verdad es que las vacaciones de papá están dando para mucho: visitas, excursiones, cenas, piscina, familia… ¡cómo nos gusta el verano!
Esta semana hemos compartido unos días con mi familia en el pueblo y ¡hemos disfrutado mucho! Esto de tener "pensión completa" está muy bien porque nos permite descansar y disfrutar de la piscina y la familia sin las preocupaciones habituales (comida, limpiar, comprar).
La vida en el pueblo nos cambia a todos. Nosotros, a pesar de vivir en un pueblo, no es tan #pueblitobueno como el de los abuelos. Con esto me refiero a que aquí las puertas de las casas pueden estar abiertas y no hay miedo. Los niños juegan en la plaza del pueblo, por la noche, mientras los padres hablan, pasean o se toman un helado, permitiendo a los niños relacionarse libremente con otros más pequeños y más grandes.
Y la parte que me tiene enamorada es que ¡el tiempo dura mucho más! Tienes tiempo para descansar, jugar, nadar, montar en bici, correr… ¡cómo nos cunde el tiempo! Y la vida fluye sin prisas…
Estos días en el pueblo de mis padres se acaban pero luego iremos al #pueblitobueno de #papádedíaydenoche y continuaremos disfrutando un poquito más, sin prisas, con la vida slowlife que tan de moda está, disfrutando de las pequeñas cosas, que son las verdaderamente importantes.
Antes de terminar el post, os recuerdo que esta semana salieron las entradas sobre cuándo deja un bebé de ser un bebé y la lactancia en verano. La verdad es que tanto tener slowlife ha hecho que me fije mucho en mi pequeño Diego. El verano pasado por estas fechas andaba yo en la recta final del embarazo y, casi sin darme cuenta, los meses han pasado y pronto estaremos preparando su primer cumpleaños.
Mi pequeño va creciendo y, por un lado tengo ese sentimiento de pena por el hecho de que deja de ser mi bebé, y también tengo el sentimiento de alegría porque estoy segura de que la siguiente etapa será genial y divertida. Siempre digo que cada edad tiene sus cosas y el primer año de Álvaro fue una pasada, pero es que ahora está para comértelo. ¡Así que seguiré disfrutándolos que es lo que más me gusta!
Y el post de la lactancia, como os podéis imaginar va sobre cómo me ayuda mantener la lactancia ahora en verano. Y es que el calor de estos días no ha hecho que nos quedemos en casa. ¡Todo lo contrario! Las excursiones, las visitas a familiares y amigos no paran, así que, gracias a la lactancia llevamos menos cositas en la mochila.
Y ahora que me despido, os cuento que voy a tomarme unos días de descanso con el blog. No podemos estar queriendo tener una conciliación real y trabajar todo el año, así que voy a descansar también con el blog para oxigenarme, llenarme de energía, temas interesantes, seguir aprendiendo con mis hijos, con mi familia y traer las pilas cargadas para continuar con este trabajo tan agradecido que he encontrado. Y es agradecido por todos los que me leéis, compartís en las redes sociales, me ayudáis a llegar a más gente y comentáis en el blog.
¡Gracias a todos por estar ahí!
¡Os deseo unas felices vacaciones y nos vemos a la vuelta!