En los bebés el cerebro está constantemente receptivo para ir aprendiendo lo antes posible y adaptarse a este mundo, podríamos decir la típica frase que son una esponja, por la gran cantidad de información y estímulos que absorbe.
Así que vamos a ver unas cuantas ideas prácticas y divertidas para aprender de una forma más rápida. De esta forma juntos bebés y papás y mamás mediante movimiento y juegos recibirán la mejor estimulación que pueden recibir. De esta forma su aprendizaje mejorará de forma drástica, tenemos que recordar que lo aprendido estos primeros años de vida irán marcando el resto, aunque tranquilos hay tiempo para todo.
Sin prisa, pero sin pausa, no debemos subestimar a los bebés, son más listos de lo que parecen y vienen a este mundo con una serie de reflejos que le irán ayudando a gatear, sentarse, andar, comer, etc.
Nuestra misión es cuidarles y ser partícipes de su proceso de aprendizaje para desarrollar sus capacidades para este mundo. Su aprendizaje es constante, se fijan imitan, experimentan haciendo que se lancen a descubrir el mundo por sí mismos.
Vamos a ir viendo actividades que les ayudan en el aprendizaje por edades.
Dar el pecho al bebé
Como comentamos los bebés nacen ya con instintos para sobrevivir y superar obstáculos, el principal nada más nacer es el reflejo de succión. De esta forma dar el pecho no sólo nutre su organismo con el mejor alimento que puede tener la leche, sino que además la alimentación rica en azúcares y grasas ayuda a ir formando el cerebro con redes más complejas de neuronas.
Tanto si se le da el pecho como el biberón es recomendable ir alternando los dos lados para ir favoreciendo la simetría y no adquirir vicios por parte del bebé.
Masajes y caricias
Una vez nacen tras el parto, los bebé dejan su medio acuoso, de esta forma van entendiendo poco a poco y siendo conscientes de su cuerpo, tamaño y límites. Así que con los masajes estimulamos sus receptores, notan su cuerpo e incluso podemos aliviar dolores de barriga con estas técnicas de estimulación tan reconfortantes.
Juegos y carantoñas
Los bebés al igual que nosotros siempre buscan comunicarse y decirnos cosas, aunque nos parezca que siempre están durmiendo y comiendo. Ellos ponen caras, emiten sonidos, lloran imitan haciendo los mismos gestos. Tenemos que entender que están comunicándose con nosotros pero como de manera hablada todavía no son capaces pues hacen hincapié en lo que van dominando su lenguaje gestual.
Así que sacarles la lengua, poner caras, o imitar los sonidos de los animales o de un motor de un coche, les va bien para ir relacionando el sonido con el objeto poco a poco y esta estimulación cognitiva tendrá un impacto realmente bueno en el lenguaje.
Más movimiento no puedo parar!
Y es que es entre en los 6 y 9 meses cuando los bebés empiezan a rodar y gatear. Es en este punto cuando empieza otra forma de descubrir el mundo más divertido y que les permite ir recorriendo diversos y diferentes lugares de la casa. Podemos ofrecerles una alfombra cómoda para tal menester o echar carreras en la cama siempre teniendo cuidado que no se caigan al suelo.
Además con estos nuevos juegos y movimientos les ayudará a adquirir fuerza y coordinación neuromuscular y por supuesto dormir mejor. Los balanceos y movimientos rítmicos les encantan y tiende a calmarles.
Darle mucho amor
Los bebés siempre quieren que los abracen y los cojan, aunque cada vez serán más independientes siempre es bueno tenerlos un rato en el pecho o cerca para que sigan sintiendo los latidos de su mamá que le acompaño durante todo el embarazo.
En el baño
Uno de esos momentos que les suele encantar a los bebés es el momento del baño, toca jugar y chapotear para dejar pasó a la relajación y la calma. Aunque este deseado efecto no se da en todos los bebés y puede que no sea del todo beneficioso para todos hacerlo antes de dormir, algunos bebés se excitan más.
Música y lenguaje
La música, sobretodo la música infantil y clásica se la podemos poner desde el nacimiento, los cuentos serán para más mayor. Pero a partir del año que ya van entendiendo mucho del lenguaje podemos ir hablándoles en otros idiomas para fomentar el bilingüismo desde pequeñines.
La comida
A partir del año o año y medio ya prueban los distintos tipos de comida y les gusta experimentar con ella, comer lo mismo que nosotros, disfrutar de esos nuevos sabores, texturas y olores que tanto estimulan a los bebés. Además recordar que lo masticación y movimiento de la lengua se ayuda al aprendizaje del lenguaje ya que se fortalecen los músculos de la boca.
Ya habéis visto que hay muchas formas de estimular a los bebés y pasarlo genial, muchas de ellas son tareas habituales, pero nosotros podemos completarlas con juegos, sonidos y música desde bien pequeñitos.
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