Pablo es un pequeño con trastorno del espectro autista que recurre al arte para expresarse. Lo que me gustó es que para la realización de la serie trabajaron con un grupo de niños con autismo, quienes contaron sus vivencias y experiencias frente al mundo, y en éstas experiencias se basa la serie. Además, también las voces del doblaje de los personajes animados son de personas con autismo.
1 de cada 160 niños nace con TEA (trastorno del Espectro Autista). ¿Que es? Es un trastorno del neuro desarrollo que muestra sus características en tres áreas: la comunicación, la habilidad social, la flexibilidad. Este trastorno se diagnostica en la infancia pero permanece como una condición de por vida.
En la serie conocemos a Pablo, que es un niño de 5 años con autismo, cuyo talento con el arte le lleva a crear dibujos con sus crayones mágicos que en su Mundo del Arte imaginario cobran vida, para ayudarle a enfrentar los retos cotidianos y sentirse seguro de si mismo. Cada capítulo de la serie es una experiencia, un reto del día a día que puede que le provoque ansiedad, y que con sus crayones mágicos y sus compañeros con autismo, Pablo logra superar con ingenio.
La serie, que se estrenó en Abril, acerca a los niños a conocer cómo es la vida con autismo, cómo se siente, cómo se vive. Federico, el niño de 9 años de Colombia que da voz al personaje principal, comentaba en una entrevista:
“¡Estoy muy feliz de darle la voz a Pablo! Si los niños ven Pablo, sabrán cómo es el mundo de los niños con
autismo, y entonces pueden aprender a tenerles más paciencia, y ser una generación más inclusiva
Federico tiene asperger, y él mismo cuenta en un video qué es esta condición y algunos de sus rasgos, como por ejemplo que:
Sus sentidos son más agudos, por lo que les molesta cuando hay muchas luces.
Sienten todo 20 veces aumentado. El sonido es 20 veces más fuerte, el tacto es como llevar varias prendas a la vez. Los ruidos los escuchan todos a la vez y más fuerte.
No comprenden muy bien el lenguaje no verbal.
No son muy hábiles con las actividades motoras, lo que les puede dar problemas para escribir.
y éstas son solo unas pinceladas.
algunos aspectos de los trastornos presentes en los niños autistas pueden ser:
Trastornos en el lenguaje
Dificultades léxico semánticas
Presencia de ecolalias
Dificultad en la comprensión del lenguaje figurado (comprenden el lenguaje de manera literal)
Agnosia auditiva verbal
Trastorno de la interacción social:
Dificultad para predecir la conducta de los otros.
Poca empatía
Dificultad para darse cuenta de las intenciones de los otros
Dificultades para comprender como sus conductas o comentarios afectarán a las otras personas e influirán en el que los otros piensen de él.
Dificultad para mentir y para comprender engaños.
Problemas a la hora de respetar turnos seguir el tema de la conversación y mantener un contacto ocular adecuado.
Trastornos de la flexibilidad:
Rigidez de pensamiento y conductas de ritual
Alteraciones en el juego (repetitivo y poco imaginativo)
Patrones restringidos de comportamiento, intereses y actividades.
Alteraciones sensoriales:
Alteraciones como las descritas arriba por Federico, en el sentido que reciben todos los estímulos ampliados: ya sea de luz o de sonido o de tacto.
En el texto se mencionan tanto el autismo como asperger, así que dejo algunas diferencias entre ambos:
asperger tiene más facilidad para volverse adulto independiente
autismo aparece a temprana edad, asperger es más dificil de detectar pues éstos niños tienen una elevada capacidad intelectual
en el lenguaje, las personas con autismo tienen dificultades para expresarse, mientras que los asperger tienen un vocabulario más rico de lo correspondiente a su edad
La capacidad de memoria de los asperger se caracteriza por almacenar muchos detalles, pero es desordenada.
Los niños autistas no tienen interés por relacionarse, mientras que los asperger si lo tienen pero les cuesta, lo que les provoca frustración.
La serie en si misma busca dar a conocer el autismo, tanto a los niños como a sus padres, y concientizar sobre lo que significa vivir con autismo. Creo que aun se desconoce mucho sobre el autismo, por eso es importante concienciar y difundir sobre ello.
Aprovecho para realizar algunas preguntas a Angela Morales, fonoaudióloga del centro CRECE, sobre este tema, para aprender un poco más sobre el Autismo y cómo detectarlo.
¿Es difícil detectar el autismo?
Actualmente existe mayor capacitación por parte de profesionales para poder pesquisar en edades tempranas el TEA, de hecho, existen avances en cuanto a políticas publicas, relacionadas a incorporar pautas tipo screening en el sistema de salud público.
Su dificultad radica en el espectro de la condición, considerando ningún cuadro igual al otro. no obstante, existe señales de alerta a considerar, como las siguientes:
Ausencia o retraso de balbuceo o lenguaje.
El niño no señala.
Cuando le hablan o preguntan algo, el niño lo repite o no contesta (pareciera que no escucha).
Falta de contacto visual.
El niño no reacciona al estímulo sonoro o al contrario posee una hipersensibilidad.
No muestra interés por los otros, prefiere jugar solo.
Presenta juegos repetitivos y restringidos (tienden a alinear los juguetes o a ordenarlos de alguna forma en particular -tamaño, color, forma)
Se observa en ocasiones apego a objetos inusuales.
Dificultad a adaptarse a situaciones nuevas o al cambio de rutinas.
¿qué tipo de evaluaciones se llevan a cabo para diagnosticarla?
Existen diversas pautas para especificar y confirmar el TEA, dependerá de cada niño, su edad y contexto. Los profesionales capacitados para realizar evaluaciones son Fonoaudiólogos, Terapeutas Ocupacionales, Profesores diferenciales y Neurológos (entre otros).
¿qué necesidades especiales necesitan los niños con autismo?
En el ámbito escolar es donde más necesitan adecuaciones, su aprendizaje tiende a ser mas visual, por tanto deben contar con un equipo de apoyo. La gran necesidad radica en su entorno, en aprender que la diversidad existe y se debe respetar, los tiempos, las formas y los temas de aprendizaje son distintos pero no por eso inferiores.
Lo más importante, siento, que necesitan de nosotros estos niños con TEA es respeto y empatía, y esa inclusión que sea no solo intencional sino efectiva. Que aprendamos a entender las diferencias que existen entre nosotros, y las acojamos en vez de dificultarlas. Dejo una frase que mencionaba Ángela en una de sus presentaciones:
No sólo soy autista, también soy un niño, un adolescente, o un adulto. Comparto muchas cosas con los niños, los adolescentes o los adultos a los que llaman “normales”. Me gusta jugar y divertirme, quiero a mis padres y a las personas cercanas. Es más lo que compartimos que lo que nos separa.