Como ya hemos dicho en artículos anteriores muchas son las compras a realizar ante la llegada de un bebé. Sobre todo cuando es el primero que nos pilla de novatillos y , sin contar, la ilusión que nos hace comprar de todo para ese pequeñajo, ¿o no? Una de las compras más importantes, al menos, desde mi opinión, es la cuna.
Puede parecer una tontería pero , cuando uno entra en el mundo de los bebés, nos damos cuenta de la infinidad de modelos de cunas que hay en el mercado. No hablo sólo de diferencias en diseño, materiales, dimensiones... sino de algo más. Dependiendo del tipo de crianza, que quieras llevar a cabo, el mercado nos ofrece tipos de cuna.
Nosotros compramos una cuna que, supuestamente, el piojo usaría hasta los 3 años, ja ja ja ja. Al año el piojo ya dormía en su propia cama. Su cuna se le hacía pequeña, no sólo por ser alto sino por moverse más que los valores del mercado. Pero, la cuna no fue su primera cama. Al llegar a casa al piojo lo esperaba un moisés en nuestra habitación. Moisés que uso un par de meses, al igual que la cuna se le hizo pequeño en un abrir y cerrar de ojos. Así que con poco más de 2 meses lo pasamos a su flamante cuna en su propia habitación.
Sí, no tenía 3 meses y él dormía en su propia habitación. Sé que para muchas mamás es una locura porque siguen la crianza con apego, colechan, etc.... Yo no estoy a favor ni encontra del colecho, quien lo quiera practicar que lo practique. Yo nunca lo haría. Las pocas veces que el piojo durmió de bebé en medio de papá piojo y mío fue un horror. Tenía miedo a terminar encima de él, eso era una, y otra se movía y movía sin parar. Además considero que un bebé necesita su propio espacio, con su propio aire, su propio olor...pero eso es sólo cuestión de gustos. Pero, si tú quieres colechar y lo que no te convence es compartir cama siempre puedes optar por una cuna sidecar
Lo cierto es que con menos de 3 meses el piojo dormía en su propia habitación, en su cuna de bebé grande. Mi terror era no escucharlo, ja ja ja, eso cualquier madre sabe que no es posible, todas nos despertamos antes incluso que haga el primer buah. Lo peor tener que levantarme de madrugada para darle de mamar, ya no era tan fácil. Ya no lo cogía de su moisés junto a mi cama y si me dormía con él en brazos estaba en mi cama. No, tenía que salir de mi habitación e ir a la suya pero a todo nos acostumbramos.
Así, el piojo se acostumbró facilmente a dormir solo en su habitación y en pocos meses nos vimos desmontando su cuna y montando su flamante cama de niño grande, je je je. Ahí todo cambió, ya no era tan fácil dormir, él podía escapar de la cama y aparecer donde estabas, así que llegó la hora de los cuentos inventados hasta alcanzar el mundo de los sueños.
¿Y tú has pensado ya qué eliges? ¿Colecho, cuna sidecar, mini cuna, moisés, cuna, cunacama...?
Besitos Avainillados