Hoy para mi ha sido uno de esos días, mi pequeña Ariadna (a la que llamaré cariñosamente bollito) y yo hemos estado con mi amiga Anna, mi mejor amiga.
Es de esas amistades que perduran en el tiempo, en las que hay épocas más intensas y otras más distantes pero que se mantiene siempre latente aunque varíe la intensidad.
Son pequeños momentos, o minutos o quizá un mínimo segundo en que creas un recuerdo, una fotografía mental de ese momento y lo llevas siempre contigo, y esas pequeñas fotografías van montando un árbol de amistad que perdura año tras año, tempestad tras tempestad.
Porque hay cosas que cambian, la vida pasa y crecemos, maduramos (o "inmaduramos" para según quién) y a pesar de todo aquello siempre hay cosas que permanecen, que se quedan; como las buenas amistades.
"Quien tiene un amigo tiene un tesoro" dijo un sabio. ¡¡¡ Y tan sabio!!! ¿Quien puede entenderte mejor con una mirada? ¿Con un suspiro? ¿Con un
Así que cuando veo juntas a bollito y a Anna, dos personas que aportan tanto y dan tanto en mi vida...."muero de amor" y te das cuenta que con tan poco eres taaaaaan feliz...
Hoy ha sido uno de esos días, donde sonrisas pícaras y miradas cómplices me han dejado la más bonita de las fotografías para ir llenando mi árbol, y con ella me despido.
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