Parecería que es mucho más importante ser capaz de leer y escribir que estar preocupados si las palabras se escriben correctamente? En gran parte esto es cierto.
Es más importante ser capaz de leer, ya que sin la habilidad de leer el mundo entero se nos cerraría. También es bueno tener la capacidad de expresarse de forma rápida con palabras, sin ser inhibido por el miedo a que las palabras se escriban con una ortografía incorrecta.
Ahora es fácil para una persona con dislexia ocultar sus problemas cuando tantas cosas hoy en día se hacen con los ordenadores y otros dispositivos digitales que tienen correctores ortográficos. Hay veces, por supuesto, en que los ordenadores no pueden ser utilizados y la información debe escribirse. Sin embargo, cada vez que una idea se pone por escrito estamos revelando mucho acerca de nosotros mismos a los demás, y es la reacción de los demás la que a menudo causa un problema.
¿Qué revela la mala ortografía sobre una persona?
En primera instancia, a menos que se sepa que es una persona con dislexia, la persona será juzgada en muchos niveles. Seguramente se pensará que puede no haber leído mucho en su vida, porque una persona cuanto más lee, ve más palabras y las almacena en la memoria. Si se considera a alguien de no ser “bien leído” esto puede sugerir que es posible que no haya tenido una buena educación. Una pieza de trabajo mal escrita puede implicar que a esta persona no le importa mucho cómo se presentan al mundo sus trabajos escritos. Todas estas observaciones son juicios negativos que se están realizando sobre alguien.
¿Qué efecto tiene la mala ortografía en el lector?
Recordar que esta es una situación en la que una persona con dislexia está siendo juzgada, aunque se ignora este hecho). Muy típicamente, la ortografía disléxica puede ser muy extraña. Los errores tal vez no puedan compararse con las palabras reales en cuestión. Además de tener debilidades de ortografía, sus habilidades de escritura a menudo también son pobres. Por lo tanto, cualquiera que lea su obra escrita, es probable que pierda la paciencia muy rápidamente y se frustre. Si esta persona va a evaluar lo que está leyendo, entonces estas emociones negativas van a dar lugar a una baja valoración.
La mala ortografía puede complicar conseguir un trabajo
Si un empleador está inundado de solicitantes luego de publicar un anuncio, es poco probable que una aplicación mal escrita llegue muy lejos. Así que una vez más la persona con dislexia saldría perjudicada.
A veces sucede que los errores ortográficos son ignorados, ya que quien lo evalúa sabe que la persona es disléxica, entonces lo que se considera son sus puntos fuertes y no los débiles. Lamentablemente esto no sucede tan a menudo como debería.
¿Por qué los disléxicos tienen tantos problemas en la ortografía?
Se debe a que los centros lingüísticos en el cerebro no funcionan tan eficientemente como deberían. Debido a su composición genética, las vías bioquímicas que forman la memoria están deterioradas y esto es particularmente notable en la lectura y ortografía. En una típica situación de clase, donde los maestros tienen una gran cantidad de alumnos y un programa de enseñanza muy largo que llevar a cabo en un año académico, no suelen centrarse en la dislexia de los alumnos. Entonces no se les da la forma adecuada de instrucción y se quedan atrás muy rápidamente.
Necesidades no satisfechas
Habrá muchos disléxicos que nunca descubrirá de lo que pueden haber sido dotados, simplemente porque sus requisitos de alfabetización no se han cumplido correctamente en clase. Ellos requieren un tipo muy estructurado, lógico y repetitivo de enseñanza. Un método que es multi-sensorial, rápido y eficaz. Tal método de enseñanza sí existe, y ha llevado a alumnos analfabetos a potenciales que nunca creyeron posibles.
Es de gran importancia y beneficio para todos los interesados, y la sociedad en su conjunto, la existencia y difusión de tales métodos, que pueden hacer posible que los alumnos y estudiantes alcancen dichos resultados.
Además, hay ejercicios físicos que ayudarán a estimular el cerebro y favorecer el aprendizaje