Hoy es un día muy importante porque mi pequeña empieza una nueva rutina, hoy después de 18 meses por primera vez ella va estar en una guardería al cuidado de nuevas personas, aprendiendo cosas nuevas y expandiendo sus horizontes. Se que no será fácil para ella y muchos menos para mi teniendo en cuenta lo apegada que estamos. Pero por supuesto se que es un proceso por el que debemos pasar y me siento muy contenta por todas las cosas nuevas que se vienen para ella.
A propósito de este tema quiero aprovechar para decir lo orgullosa que me siento de haberme podido dedicar estos 18 meses de su vida enteramente a ella (24/7). Ya que a diferencia de lo que aún gran parte de la sociedad cree, el quedarse en casa cuidando de los hijos no es un lujo, sino un beneficio para la familia y especialmente para los hijos. Tal vez pueda decir que es un privilegio, pero que quede bien claro que privilegio y lujo no es lo mismo. Para quedarse en casa cuidando de los hijos tiempo completo hay que tener las faldas bien puestas.
He escuchado a mucha gente por ahí referirse a otras madres diciendo. “Que afortunada fulanita que el marido la mantiene”, o que afortunada mi amiga que no tiene que ir a trabajar” pues yo les digo Las mamás que decidimos quedarnos en casa cuidando de los hijos no iremos a una oficina pero en la casa se trabaja señores se trabaja muchísimo y este trabajo requiere de mucha paciencia, organización, recursividad y sacrificio… Y es que en este trabajo no hay horarios fijos de descanso, ni para ir a almorzar o tomar merienda. Cada día con nuestros hijos pequeños vivimos una aventura diferente que puede estar llena de alegrías, risas y juegos o una aventura que puede convertirse en todo un reto, ya que este pequeño depende de nosotros al 100% y apenas está aprendiendo a descubrir al mundo.
En este trabajo de ser mamá y dedicarte a ellos día y noche el desgaste no es solo físico sino mental, y cuando llega la tarde/noche no te vas y cierras la puerta, no cambias de ambiente o dices vuelvo mañana.. sino que sigues ahí como soldado en guardia a la espera de cualquier llamado. Ojo, yo estoy convencida que este es el trabajo más gratificante del planeta, es hermoso… pero también agotador. Por eso simplemente creo que debemos valorarlo mucho y mirar más allá de lo que a simple vista pueda parecer.
Creo que debemos entender que las madres que se quedan en casa cuidando de los hijos no son mantenidas, sino que por el contrario mantienen su casa y su hogar. No se dan el lujo de la vida sino que trabajan a pulso como lo hace cualquier otra mujer profesional que va a su trabajo de oficina diariamente y me atrevería a decir que hasta más.
Admiro,respeto, valoro el trabajo de todas las mamis que cuidan de sus hijos 24 horas al día… ya sea porque fue tu llamado o por otras circunstancias, quiero que sepas querida mamá que yo entiendo la responsabilidad tan grande que tienes y los sacrificios que implica y te felicito de corazon. Tus hijos lo agradecerán algún día.
Para terminar les dejo esta frase de Janet Doman que un dia cuando más lo necesitaba me llegó al corazón.
“Madres Profesionales son madres de tiempo completo que asumen su trabajo con la misma pasión y dedicación que otros profesionales devotan a ser ingenieros, doctores, abogados.. etc. Si tu eres un padre o madre de tiempo completo, tú eres miembro de la profesión más antigua de la historia y la más honorable del mundo”
#JanetDoman
Cual es tu opinión al respecto, ¿alguna vez has sentido que algunas personas demeritan tu trabajo como mamá que cuida a sus hijos tiempo completo desde la casa? dejanos tus comentarios
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