¿Por qué tener un hijo/a?

La maternidad es un deseo que suele aparecer en algún momento en la vida. 

No todas las mujeres tienen este anhelo, pero sí muchas de nosotras.

Siempre he pensado que es la fuerza y el impulso de la vida misma, deseosa de perpetuarse y extenderse, que nos hace sentir ese llamado. Estamos programadas biológicamente para ser madres. ¿Pero quizás hay algo más que la biología? ¿Qué impulsa ese deseo tan grande de tener un hijo? ¿Y cómo podemos prepararnos para ello?

Justamente de todo esto he hablado hace poco con una buena amiga y psicóloga especialista en terapias energéticas, Mireia Girbés. 

Su sensibilidad, su manera de abordar su maternidad y cómo lo divulga desde su blog Canela y Almendras,  me parecen un referente ahora mismo entre los blogs de maternidad consciente,  y por eso quiero compartir contigo las preguntas que le hice, y lo que ella me contestó.



 ¿Cuál es la verdadera motivación que lleva a una madre y a un padre a querer traer una nueva vida a nuestro mundo?

Amar. Unirse amorosamente hacia un nuevo ser a quién amar incondicionalmente.

Detrás de cualquier decisión que tomamos siempre hay más de una razón, también es así en el deseo de ser madre, de formar una familia. 

La decisión puede ser motivada en parte a nivel cultural y social, a través de nuestros amigos, conocidos y familiares “¿y vosotros para cuándo?”, “a ver si me hacéis abuela”, “se te va pasar el arroz”…

También está la explicación biológica, la de perpetuar la especie a través de la combinación genética, y desde la espiritualidad hablamos de los pactos entre almas para nuestra evolución. 

Pero me preguntas sobre la verdadera motivación y creo que ésta es el amor.

Lo que nos lleva a la maternidad y a la paternidad es una pulsión de amor, de creación, de unión cómplice con el otro para amar más allá de nosotros mismos.



¿Cómo saber si una mujer está preparada para ser madre?

Sabes que estás preparada para ser madre cuando al ver lo complicado que es, y la responsabilidad que implica, te comprometes a dar lo mejor de ti misma, en cada momento de tu vida, cuando tienes la predisposición de ser cada día mejor para tu hijo/a y para ti misma. 

Estás preparada cuando te abres a que tu maternidad sea un proceso de crecimiento personal, de transformación en el que te re-descubrirás a ti misma y a tus propios padres a través de la crianza.

 

¿Cómo prepararnos para concebir?

Para concebir es necesario contactar con el amor, la paciencia y la confianza.

En el tiempo en el que estamos buscando un embarazo estamos vibrando en unas emociones que son traspasadas al bebé en el momento de la concepción. ¿Cómo es esa búsqueda del embarazo? ¿Es una espera tensa, nerviosa, ansiosa, o es desde un lugar de confianza en el bebé, sabiendo que llegará en el momento perfecto para él y para nosotros? ¿Qué espera le quiero ofrecer a mi futuro hijo/a?

Nosotros estuvimos 3 años esperando a nuestra hija. Aprendimos a estar a la espera de la concepción sintiendo el amor hacia nuestros y hacia ella, olvidando los calendarios y las fechas, confiando en la Vida, en la sabiduría de nuestros cuerpos y de nuestra hija.



Cuando el embarazo llega, ¿Cómo cuidar el vínculo con el bebé durante la gestación?

Es un vínculo muy grande, uno de los más importantes, de los más potentes de nuestra vida, y también de los más cruciales ya que el desarrollo de ese ser depende del vínculo que creemos. 

Es importante expresar lo que sentimos, todo nuestro amor pero también los miedos y las dudas que aparezcan, compartir nuestros sentimientos y pensamientos con el bebé ya que él también los está sintiendo. 

Compartir el día a día, hablarle, escribirle, presentarle a las personas que son importantes para nosotras, cantarle, acariciarle… ¿Sabes que cuando una embarazada pone su mano sobre su barriga el bebé se mueve hacia ahí para ser acariciado? 

Lo que le diría a una mujer embarazada es: “Ábrete a sentirle y a sentir todo el amor que hay en ti para él.”

 



Hay tanta sencillez y verdad en las palabras de Mireia ¿verdad?

Me aporta siempre mucho su sabiduría y su manera de transmitir, y por eso le propuse que hiciéramos algo juntas.

Porque al conectar con el deseo de tener un hijo/a y ese amor incondicional del que nos habla, pensé después, ¿y cómo sanar desde el amor cuando perdemos un hijo/a de forma prematura, ya sea en el vientre o poco después?

Esto es algo que yo misma viví y que me marcó mucho. Al principio solo pensaba en volver a quedarme embarazada, ese deseo de ser madre era mucho más intenso. Y necesité un tiempo de sanación, no sin ayuda, para abrirme a comprender. 

Quizás has vivido esta situación, y sabes a lo que me refiero. 

Así que mejor que escribir sobre ello, ambas pensamos que podríamos aportar más creando algo diferente, y es para esto precisamente que quiero pedirte ayuda.

Experiencia de sanación para madres que han perdido un hijo/a en el vientre

Estamos preparando una experiencia de sanación para mujeres que han transitado una pérdida gestacional o perinatal. Será algo que haremos en agosto y vamos a comenzar a compartir los detalles muy pronto.

Pero si has vivido esta situación en algún momento y  sientes que hay algo pendiente que sanar o resolver tras esa pérdida, o quizás conoces a alguna mujer de tu entorno que pudiera necesitarlo, entonces te animo a que te apuntes a la lista de espera y en unos días te enviamos todos los detalles de lo que estamos organizando.

Pero te adelanto algo, será on line, algo único,  que no se ha hecho antes,  y estaremos las dos acompañando y facilitando el proceso.

Inscríbete en la lista de espera aquí:

¡Muchas gracias por ayudarnos a compartir y poder llegar a muchas mamás que necesitan sanar esta pérdida! 

Lo que nos lleva a la maternidad y a la paternidad es una pulsión de amor, de creación, de unión cómplice con el otro para amar más allá de nosotros mismos.

Mireia Girbés Tweet