Una vez tu bebé tenga alrededor de 6 meses (4 meses en casos recomendados por el pediatra), podrás comenzar a introducir alimentos sólidos en su dieta. Al comenzar el proceso de destete, es mejor comenzar ofreciendo papillas con una textura completamente suave y líquida, similar a la de la nata espesa.
Cuando tu pequeño se acostumbre a tragar y a tomar cucharadas de comida, podrás introducir gradualmente purés y papillas con más grumos y una consistencia más espesa. No es fácil que los pequeños acepten un cambio en la textura de su alimento; tampoco lo es el tema de qué alimentos son los más adecuados. Así que no es de extrañar que recibamos muchas consultas sobre cómo preparar la primera papilla para bebés.
Como normal general, es importante que introduzcas los alimentos poco a poco de cara a observar posibles reacciones alérgicas. Puedes echar un vistazo a estos primeros alimentos para bebés. También es esencial que entiendas, ya sea que elijas baby led weaning o alimentación triturada, que en el proceso introductorio de la alimentación complementaria debe ser el bebé quien tome decisiones tan importantes como qué, cuándo y cuánto comer. No obligues nunca a que tu hijo coma la receta que preparaste; este y otros consejos te los detallábamos en nuestro especial razones por las que mi hijo no come.
Es totalmente normal que los bebés adoren los sabores dulces y rechacen los sabores neutros o salados, ¡no te atormentes! Poco a poco irá tolerando nuevos y variados sabores. Para empezar puedes introducir únicamente papillas de fruta o papillas de cereales. Esta papilla de frutas y leche también puede ser una excelente opción.
Prueba a dar un poco de papilla antes de una toma de pecho o leche de fórmula. Llegados a este punto, hay bebés que sienten un flechazo a primera vista por la comida complementaria y otros que se resisten al cambio; todos los bebés son diferentes. No hay problema.
Después de un par de días puedes probar a introducir una primera papilla de verduras. Poco a poco introduce carnes, pescados, legumbres… No tengas prisa. La leche sigue siendo la base de la dieta de un bebé de 6 meses de edad. A continuación, te mostramos varias recetas de primeras papillas para bebés.
Primera papilla de verduras
Ingredientes:1 patata mediana
1 zanahoria
Un trozo de calabaza
1/4 cebolla pequeña
Una cucharada de aceite de oliva virgen extra
Elaboración:
Pon a cocer las verduras lavadas y troceadas en un poco de agua (suficiente para que cubra la verdura). Agrega la cucharada de aceite y deja cocer durante unos 20 minutos a fuego medio-alto.
Cuando la verdura esté tierna, cuela el caldo y resérvalo.
Tritura la verdura hasta formar una papilla espesa y sin grumos.
Agrega poco a poco el caldo reservado hasta conseguir la textura deseada.
Ver primeras verduras para bebés.
Quizá te interese:
Puré de patata para bebés
Puré de puerro y patata
Puré de calabaza para bebés
Puré de calabacín para bebés
Primera papilla de frutas
Ingredientes:1 plátano
1 naranja
Elaboración:
Tritura el plátano con el zumo de la naranja exprimida hasta formar una papilla suave. A esta papilla de fruta básica le puedes agregar más tipos de frutas conforme pasen los días.
Quizá te interese:
Puré de mango
Primera papilla de cereales
Ingredientes:1 vaso de leche materna, leche de fórmula o leche vegetal.
1/2 vaso de copos de avena finamente molidos (ver cómo hacer harina de avena)
1 manzana (opcional)
Elaboración:
Cocina a fuego medio durante 3-4 minutos la leche junto a la avena molida, removiendo para evitar que se pegue. Si quieres aromatizar la papilla de cereales, incorpora una manzana troceada y déjala cocinar con la leche y la avena para que su aroma se impregne en la mezcla.
Si incorporaste la manzana, vigila que no ofrezcas la papilla con trozos. Puedes batir la papilla con o sin manzana para asegurarte de que la papilla queda suave y sin trozos.
Ofrece primeras papillas con alimentos de fácil digestión. En cuanto a la cantidad de veces al día que se deben ofrecer las primeras papillas, el número debe oscilar entre una y dos veces. Poco a poco el número de comidas aumentará. No olvides que, siempre que tu hijo esté sano, es importante darle comida solo cuando a él le apetezca. No obligues y disfruta del proceso, ¡es muy bonito!