Hoy mismo saltaba la alarma en Francia, ya que un estudio realizado por la Agencia Nacional de Seguridad Sanitaria de alimentación, medioambiente y trabajo ha detectado la existencia de sustancias químicas que podrían entrañar riesgos para los bebés. Entre esas sustancias están perfumes alergénicos, dioxinas e hidrocarburos aromáticos policíclicos (HAP). El gobierno francés ha solicitado a los fabricantes la eliminación de estos compuestos en la fabricación.
En total, la agencia francesa ha identificado 60 sustancias, entre las que se incluye el glifosato, un herbicida cancerígeno u otros pesticidas prohibidos en la Unión Europea, como el lindano, el quintoceno o el hexaclorobenceno.
En un artículo publicado en el periódico El País se señala que
“Hay un cierto número de sustancias que superan los límites sanitarios y que por tanto es urgente eliminarlas o reducirlas al máximo, algo que es absolutamente posible de hacer hoy en día”, ha explicado el director delegado de Anses, Gérard Lasfargues, en la emisora Franceinfo. Durante sus primeros tres años de vida, un bebé llega a portar 4.000 pañales. Algunos de los componentes del pañal pueden “migrar a través de la orina del bebé” hasta “ser absorbidos por la piel”, lo que puede dar lugar desde “alergias cutáneas por sustancias perfumantes hasta, quizás, riesgos cancerígenos por los PCB o las dioxinas”, agregó.
Por su parte la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) ha publicado en su página web esta información:
OCU, en colaboración con otras organizaciones de consumidores europeas, también analiza regularmente los pañales para bebés, prestando atención a su calidad (eficacia a de la absorbencia, riesgo de fugas…) tanto como a la seguridad.
En el anterior estudio, realizado en 2015, detectamos la presencia de hidrocarburos aromáticos policíclicos (HAP) en 2 de las 13 muestras, encontramos fenantreno y naftaleno, en cantidades muy pequeñas, por debajo del límite legal. Pero a nuestro juicio, como éstas son sustancias potencialmente cancerígenas, no pueden estar en productos destinados a bebés, ni siquiera en esas cantidades mínimas.
Sin embargo, posteriores estudios han demostrado que este problema ya es historia. En nuestro último análisis de pañales, cuyos resultados ya se pueden consultar online y aparecerán publicados en un completo artículo en OCU-Compra Maestra, hemos analizado 14 pañales desechables de 9 marcas, de las más vendidas en nuestro país para niños de 9 meses a 2 años (talla 4), y no se ha detectado presencia de estos productos químicos perjudiciales en ninguno de ellos, a diferencia de lo sucedido en el anterior.
Hacen falta más controles en los productos para bebés
Afortunadamente, los datos de nuestro estudio son tranquilizadores, si bien los resultados de Francia deben hacernos pensar. Por eso, siguiendo las recomendaciones de la Agencia de Seguridad Sanitaria Francesa, y como venimos haciendo desde hace años en nuestras publicaciones, pedimos a los fabricantes que eviten utilizarsustancias potencialmente peligrosas en la composición de los productos para bebés, por ejemplo las fragancias alergénicas o los residuos de fabricación como HAP. También hacemos nuestra la petición de un mayor y mejor control del origen de las materias primas usadas, en especial en productos como estos, destinados a un público tan sensible.
Fuente: OCU https://www.ocu.org/consumo-familia/bebes/noticias/sustancias-peligrosas-panales (24 enero 2019) / El País https://elpais.com/sociedad/2019/01/23/actualidad/1548237491_077406.html (24 enero 2019)