Se está acercando uno de los momentos claves en los padres y madres primerizos. Toca elegir colegio. Empiezas a darle vueltas ya que es una de las decisiones que va a cambiar tanto la vida de los papas y mamas como de los niños y niñas. Ya que allí es donde pasará la mayor parte del tiempo de sus próximos 15 años, donde encontrará a sus amigos e incluso quizás a su pareja y donde al final se convertirá en lo que será mañana. Un mar de dudas te invade ante semejante decisión.
Voy a aprovechar la entrada para explicar cómo tomamos mi mujer y yo la decisión, y que puntos pensábamos que había que valorar por encima de otros. Recordad, siempre en nuestra opinión. Nuestra elección final fue el colegio María Auxiliadora, Salesianas de Zaragoza.
María Auxiliadora Salesianas
Había dos cosas muy claras. Primero, que tenía que ser un cole del barrio y segundo que no fuera muy grande. No nos gustaba, ni nos gusta, la idea de meter al niño en un autobús dos viajes al día porque pensamos que si su colegio está cerca de su casa, se interrelacionará más con su entorno próximo, ya que es donde más probablemente estén todos sus compañeros de clase que al final se convertirán, con mucha probabilidad, en su grupo de amigos.
Tanto mi mujer como yo venimos de uno de los colegios más grandes de Zaragoza y al final, aunque siempre depende de los profesores y el entorno, el trato es mucho más impersonal que en los coles pequeños. De hecho cuando vamos por el parque del barrio y un niño de los mayores saluda a tu hijo y le preguntas: "¿quién es ese niño?", te contesta: "Un amigo del cole", inevitablemente se te dibuja una sonrisa de satisfacción y tranquilidad.
Amigos del cole
Empezamos a mirar colegios, fuimos a unas cuantas jornadas de puertas abiertas, donde cada colegio explicaba su sistema educativo y nos enseñaban las instalaciones. De todos los que vimos el que más nos gustó fue María Auxiliadora, en la parte alta del barrio de San José, porque cumplía los requisitos que nos habíamos puesto. No es muy grande, tiene 2 vías donde cada niño es único, además de una vía de apoyo ya que uno de sus principios es que no se quede nadie atrás, en mi cole a los que se quedaban atrás les invitaban a buscar otro centro de estudios. Otra de sus prioridades es que todos sean como una única familia, y lo consiguen haciendo las actividades mezclando a los pequeños con los mayores. Todos ganan.
Nos gustó mucho que el colegio tuviera infantil, primaria y secundaria, porque pensamos que son pequeños para cursar secundaria en un instituto (quizás porque ninguno de los dos lo hicimos). El cole no tiene bachiller pero cuenta con tres módulos de formación profesional de finanzas que llegado el momento es otra opción a valorar. Desde hace dos años implantaron el bilingüismo en inglés, que sumado a las dos horas de extraescolares (en nuestro caso) de la propia asignatura les prepara para conocer el idioma desde pequeños.
También nos sorprendió el pabellón cerrado, el amplio teatro al que le dan mucho utilizad porque allí hacen obras, asambleas, "buenos días" y los festivales de navidad. Nos pareció muy interesante que eran pioneros en el sistema Rubicon (aprendizaje de matemáticas).
Extraescolar de Robótica proporcionada por el AMPA
Pero sin duda lo que más nos gusta y no sabíamos cuando lo elegimos es que se trata de un cole VIVO. Siempre hay eventos, siempre ocurren cosas, siempre hay una excusa para juntarnos. En el Pilar, ofrenda; en Navidad un Belén viviente al que viene incluso la tele. Vienen los carteros reales un domingo al colegio, luego incluso los Reyes Magos hacen acto de presencia en el teatro junto con actuaciones de los payasos Kin y Serrucho. En San Patrick, la fiesta de los sombreros; en jueves lardero, a comer longaniza; en carnaval se hace un desfile por las calles próximas al colegio; un fin de semana es la fiesta del deporte, donde los hijos nos retan a los papas. Otro fin de semana es la fiesta de la comunidad educativa, en la que se sacan barras al patio, hinchables, verbena, fiesta de la espuma. Otra cosa que nos encantó es que había una actividad en la que los niños pasaban una noche dentro del cole.
Patio de Maria Auxiliadora
Puede que en otros colegios del barrio también hubiéramos estado muy contentos pero si hoy nos tocará tomar esta decisión otra vez no dudo que elegiría el mismo.