CURSO MONTESSORI – EDUCAR EN CALMA
El mundo de la maternidad es una locura y poco tiempo tenemos para leer. Así que lo debemos aprovechar muy bien. Eso es lo que pensé cuando tuve la oportunidad de realizar este curso, que había sido tiempo bien aprovechado. Por desgracia, lo fui retrasando y hacía casi un mes que lo tenía pendiente cuando dije ¡ahora o nunca! Y fue empezar y no poder dejar de leer.
Si ya has leído algo sobre el método Montessori, sabrás que es tanto una forma de educar como una filosofía de vida. No se trata de educar en este método al niño una hora al día, ni de tener una esquinita para el niño con juguetes Montessori. Se trata de mucho más. Esto es lo que me ha enseñado el curso y con lo que me quedo: hay que integrar al niño en el día a día, hacerle partícipe de todo porque nuestra casa también es la suya.
Aunque es de lógica que este también es el hogar de Manuel… he pensado que ¿cuántas veces he dicho eso no se toca? o “no cariño, ahí no se juega”. Y Manuel tiene siete meses y medio. Imagino que cuanto más grande sea, más querrá explorar SU casa.
NUEVO PLANTEAMIENTO DEL DÍA A DÍA
Cuando acabé el curso sentí la obligación de darle las gracias a Ely, ya que no estaba planteando correctamente la forma de hacer las cosas en casa. A partir de ahora espero poder ir integrando en NUESTRA casa esta filosofía de vida.
Para mi eso es lo que hace bueno y provechoso un curso o taller; que te haga replantear tus esquemas.
¿Tu también quieres aprender más sobre el método Montessori? Pues aquí te dejo el enlace del curso que hice yo. Y tiene un montón más con una pinta increíble. Pasa por su página y seguro que alguno cae…
¿Conoces la filosofía Montessori? ¿La utilizas en el día a día?
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