Buenos días a todxs!!!
Hoy la entrada es un post súper especial! Lo ha escrito “mi doula” (así la llamo yo).
Una maravillosa persona que nos ayudo, cuando todo parecía no tener arreglo, llegó Monica a nuestras vidas para “guiarnos” a través de nuestros instintos a un camino que, por varios motivos y en algún momento, habíamos desviado.
Le pedí que escribiera lo que, bajo su punto de vista, era ser una doula y aquí lo tenemos…un texto lleno de emoción, que me hizo volver en el pasado y revivir tiempos muy duros, pero que mi hicieron mejor persona.
Besos Monica…mi doula ;-)
SER DOULA
Me han pedido que escriba un pequeño artículo sobre lo que es ser una doula? Estos párrafos pretenden ser, no más que un testimonio, nada parcial, escrito desde lo que yo pienso y siento.
Si tuviera que hacer una definición de doula para un diccionario diría: ?Mujer que acompaña emocional y prácticamente a otras mujeres en todas las etapas que rodean el nacimiento (gestación, parto y post-parto).? Más creo que esta frase se queda corta para describir lo que se mueve en una al realizar este trabajo, además de resultarme una descripción algo fría?
Ante todo quiero decir que acompañar de esta manera es un privilegio. Para la doula lo es, sobretodo, por el regalo de poder compartir momentos tan íntimos con familias generalmente ajenas a ella, que depositan su confianza y se abren hacia una persona a la que apenas conocen. Pero también es un privilegio para la mujer acompañada por la doula, a la que se le ofrece un espacio sagrado en el que va a ser aceptada tal como es y donde puede expresar libremente lo que siente. Algo a lo que no estamos demasiado acostumbrad@s.
Para la doula es un ejercicio de dejar a un lado su propio ego, sus esquemas mentales sobre lo que es correcto y lo que no, para ofrecer su apoyo incondicional a la mujer que la ha elegido como doula, tome las decisiones que tome? El objetivo primero y último de este acompañamiento es ofrecer un limpio reflejo de la mujer a la que se acompaña, de manera que ésta va haciendo sus propias elecciones, sin la interferencia de alguien que ?sabe más que ella?, tomando así todo su poder.
Para la madre es un viaje hacia el autoconocimiento, al permitirse expresar lo que siente y piensa, y hacia la confianza en sí misma, al atreverse a elegir libremente. Es un viaje que puede discurrir por diferentes caminos, ateniéndonos a las diversas demandas y necesidades que cada mujer y cada familia tiene en cada etapa. Unos tomarán una forma más práctica y material, como pueden ser facilitar el acceso a todo tipo de información o acompañar a visitas médicas, y otros una forma más sutil, como la escucha activa o una simple caricia.
En resumen, ser doula es el privilegio de estar presente para ofrecer un espacio de aceptación y confianza a las personas a las que acompaña, dándoles apoyo emocional y práctico para facilitar su bienestar en todas las etapas alrededor del nacimiento.
Mónica Jiménez Lucena
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