Metidos ya en harina, tengo que decir que Carlos González me sorprendió gratamente en persona. Tengo que reconocer que me siento muy cercano a su forma de pensar y de ver la crianza. Y que me encanta su forma amena y divertida de explicar las cosas. Pero había leído en otros blogs que en persona era más bien soso y borde. Y se ve que nosotros le pillamos en un buen día, porque la charla fue tan amena como sus escritos. Y muy divertida. Varias veces sonaron carcajadas en el auditorio en las tres horas que duró la presentación y el turno de preguntas. Aunque esto tampoco tiene mucho mérito cuando tienes a 200 carlosgonzálezibers como público.
Carlos González nos proporcionó mucha información y muchas pautas interesantes sobre la alimentación complementaria y el Baby led weaning (BLW) que voy a intentar sintetizaros en seis ideas básicas:
1. Obsesión por engordar y fe ciega en los pediatras: Vivimos en una sociedad en la que madres y pediatras están obsesionados por el peso. “Si tenemos una generación de niños obesos y sus madres piensan que sus niños no comen, alguien está haciendo las cosas mal”, dijo al respecto. Antes de valorar la fe ciega que muchos padres profesan a los pediatra de forma totalmente injustificada. “Los pediatras no somos nutricionistas, ni psicólogos, ni educadores. La alimentación es una parte muy secundaria de los conocimientos de un pediatra”.
2. Qué tienen que comer los niños: Carlos González bromeó diciendo que seguro que muchas madres podrían haber ido a la charla para eso, pero que él no podía decirnos nada al respecto sin inventárselo. “Nadie en el mundo sabe cuánta cantidad de comida necesita tu hijo salvo él mismo. Las cifras que dan los pediatras suelen ser medias al alza. Ni siquiera los mejores científicos se ponen de acuerdo, por ejemplo, sobre la cantidad de vitamina C que necesita un bebé. ¿Cómo vamos a saberlo nosotros?”.
3. Objetivo de la alimentación complementaria: Vaya por delante que Carlos González habló en todo momento del BLW o alimentación a demanda. “El objetivo de la alimentación complementaria no es nutricional, sino educacional. El objetivo último es que tu hijo como normal. Es decir, que coma comida normal (lo que se come en casa) de forma normal (como tú lo comes)”. En este punto habló de la importancia de fomentar esto desde los seis meses, porque de lo contrario sólo estás aplazando para más adelante (hasta los dos o tres años) un proceso normal en el crecimiento del bebé.
4. La leche materna como alimento principal: Es posible que durante las primeras semanas/meses de iniciación al BLW, los bebés apenas prueben bocado y sólo jueguen con la comida. No hay problema, porque la leche materna sigue siendo el alimento fundamental y aporta a los niños todos los nutrientes que necesitan. Aquí hizo mención a un lugar común bastante extendido que es aquel de decir que a partir de los seis meses la leche materna ya no alimenta porque es agua. “Mentira. Es mantequilla. Cuanto más tiempo de lactancia pasa, más grasa tiene la leche de la madre”.
5. España en comparación con otros países: Gran parte de la conferencia se basó en el documento Starting to Sponfeed your Baby (foto), que es la guía de introducción de la alimentación complementaria elaborada por el Ministerio de Sanidad irlandés. Podéis visitarlo haciendo click en el enlace y aunque está en inglés, es más que comprensible para el nivel medio español (el mío). Sorprende desde la imagen de portada, donde aparece un bebé comiendo sólo comida a trozos. Y sorprende en su interior, donde a partir de los seis meses no hay ninguna referencia a papillas, biberones o cantidades. Es el bebé el que decide cuánto come. Y lo come él solito y con sus propias manos. Nada de cucharas, salvo que sean para que el bebé experimente también con ellas. “En los países civilizados el niño que toma teta nunca toma biberón. Aquí pensamos que son dos fases. Los niños de teta tienen que beber agua del vaso y hay que animarles a ello a partir de los seis meses. Por lo demás no necesitan agua, ya que con la teta de su madre tienen suficiente hidratación. Lo mismo pasa con el puré. En los países normales el puré es algo que dejan de comer los niños a partir de los seis meses”.
6. Confianza en el bebé para acabar con el miedo de los padres: Si practicas BLW, tienes que dar por hecho que tu bebé se va a atragantar. Igual que se atragantaría tomando papilla. “Si no le das de comer para que no se atragante lo único que estás haciendo es retrasar el proceso. Se atragantará luego con tres años. Es como si no dejases a tu hijo que aprendiese a andar porque se va a caer”. De ahí la importancia de dejar hacer y experimentar a nuestros bebés. Aunque como padres nos cueste. “Es importante dejar que los niños hagan las cosas cuando las quieren hacer. Tardarán más en comer y se ensuciarán, pero aprenderán”.
PD: Un último consejo muy importante que dio Carlos González para las madres. “Vuestras suegras siempre tienen razón. Hacedles caso. Ahora no lo entendéis. Lo entenderéis cuando se casen vuestros hijos” XD