Este estudio, realizado en la Universidad de Australia Occidental señala no sólo cómo cada década los niveles de vitamina D en las mujeres occidentales, van descendiendo alarmantemente, sino, precisamente lo negativo que puede llegar a ser esto para el feto, ocasionando en muchos casos diabetes gestacional y otros trastornos en la gestación, e incluso, problemas de psicomotricidad en los bebés cuyas madres tuvieron déficit de vitamina D en su embarazo y anteriormente.
Por supuesto, es sólo parte de una ristra maś de estudios acerca de la importancia de una vitamina, y muchas pensaréis que ni siquiera son del todo concluyentes, sin embargo es cierto que últimamente cada vez son más los médicos que aconsejan suplementos de vitamina D a las mujeres que buscan el bebé.Se insta a comer más alimentos que la posean, como: pescado azul, salmón, leche, zanahorias, etc. Esto representa una forma indirecta de adquirir tales proteínas y vitaminas.
Entre la población más vulnerable o aquella que requiere con mayor inmediatez la ingesta de los productos con vitamina D, son aquellas féminas que rara vez se exponen a los rayos UV (con o sin protección), mujeres vegetarianas, de piel sumamente blanca, etc.
Lo que algunos bloggeros sobre crianza comentan en la red, como es el caso del conocido papá y bloggero @ArmandoBastida es que, seguramente, ''la naturaleza no tenía previsto que las mujeres trabajaran bajo techo'' tantas horas al día.
¿Qué opináis de esto? ¿Pensáis que el descenso de vitamina D en las mujeres se debe a la mayor concienciación que hay de cáncer de piel por ejemplo y que por ello huímos del sol?
Foto Via Mother&Baby