Si a vosotros en vuestra casa os pasa como a nosotros que los briks de leche van que vuelan, podréis ir recogiendo tapones de manera muy sencilla y rápida. Para las actividades que os proponemos en este post, se necesitan materiales muy sencillos y que seguramente tendréis en vuestra casa. Recoged los tapones de leche durante varios días, si podéis guardando tanto el tapón como la base del mismo, y así podrán jugar con ellos en cuanto tengáis unos cuantos para cada uno de los niños. La idea es que según la edad, hagan unas actividades u otras, así todos juegan con los mismos materiales, pero cada uno en su etapa de aprendizaje y sobre todo, en su periodo sensible determinado. Esto viene muy bien sobre todo cuando hay hermanos de diferentes edades y todos quieren jugar con los mismos materiales.
Las 3 actividades que os planteamos son sencillas, con materiales Disponibles en casa y rápidas (para improvisar en cualquier momento).
Vamos a ver las actividades:
1. Insertar tapones dentro de una caja.
Esta actividad es para niños pequeños. A partir de los 12 meses (algunos bebés, incluso antes), a los niños les encantan los juegos de insertar. Ya sean aros de madera, de plástico, o colocar muñecos en un vehículo, todo supone insertar un elemento en otro.
Necesitáis:
Unos cuantos tapones de leche, si es posible con su base también.
Alguna bandeja o cajita para que tengan todos los tapones localizados.
Una caja de toallitas de bebes o cualquier otro tipo de contenedor con tapa, al que se le pueda hacer una agujero en la parte superior y puedan abrirlo y cerrarlo.
En este caso, les ofrecemos un montón de tapones en algún recipiente y una caja de toallitas de bebe vacía, con las pestañitas de la tapa superior dobladas hacia dentro para que quepan los tapones como se ve en la imagen:
El pequeño o la pequeña tendrá que insertar todos los tapones, abriendo primera la tapa superior donde está el agujero para insertar los tapones y metiendo cada tapón por el mismo. Cuando termine, querrá averiguar donde están los tapones y abrir la tapa grande para volver a sacarlos. Si puede sol@, fenomenal, pero si veis que le resulta complicado, le ayudáis y le enseñáis como se abre, para que pueda volver a poner todos los tapones en la cajita donde estaban inicialmente, para volver a hacer la actividad tantas veces como quiera.
Muy sencillo ¿verdad? Pues pueden estar un buen rato insertando y sacando y volviendo a empezar. Les encantará.
2. Escribir números en los tapones y ordenar la numeración.
Esta actividad es para niños mayores de 2 años. La idea es que escriban ellos mismos los número en los tapones (o se lo escribáis vosotros si todavía no controlan bien la escritura) y usando una base de corcho o algún material similar donde puedan clavar palillos, hagan alguna formación con ellos y coloquen los números de manera ordenada.
Necesitáis:
Unos cuantos tapones de leche, en este caso con o sin base.
Palillos
Algún cartón o corcho que tengáis de alguna caja de embalaje.
Un rotulador permanente.
Comenzamos con una conjunto de tapones en los que el niño o niña tiene que escribir en la parte superior de cada uno de ellos, los número de manera consecutiva, usando para ello el rotulador permanente. Tendrán que poner el número en todos los tapones que les hayáis dejado preparados, así que no pongáis demasiados (hasta 20 está bien, si tenéis tantos tapones recolectados).
A continuación, les damos el mismo número de palillos que de tapones numerados y una base de corcho o material similar para que los claven haciendo algún tipo de formación (a elección suya).
Por último, cuando hayan puesto todos los palillos, deberán colgar los tapones numerados de manera consecutiva en los palillos, ordenados de menor a mayor o al revés.
Es también muy sencillo y les encanta clavar los palillos y encontrar el equilibrio para cada tapón y que se quede colgando del palillo.
La actividad de colgar los tapones también lo pueden hacer niños menores, sin considerar que hagan la ordenación de números, aunque podemos enseñarles a hacerlo para que vayan fijándose y aprendiendo.
3. Pintar tapones de colores con un pincel o con los dedos.
Esta actividad también es para niños mayores de 2 años o un poco más pequeños, siempre y cuando sepamos que no intentan llevarse a la boca la pintura que usaremos para los tapones.
Necesitáis:
Unos cuantos tapones de leche, si es posible con su base también.
Temperas de colores
Pinceles
Un bote con agua para limpiar el pincel y algún trapo o papel de cocina para secarlo.
Algún plástico o base protectora para la mesa donde trabajen
Palillos
Algún cartón o corcho que tengáis de alguna caja de embalaje.
Para ello, colocáis primero el protector de plástico en la mesa donde vayan a pintar. Les dais los colores, los pinceles, vaso de agua y el trapo. Con ello, les ofrecemos un montón de tapones y que vayan pintando cada uno de ellos del color que quieran. Si cambian de color, deben limpiar el pincel con el agua y secarlo con el trapo o papel de cocina.
Para secarlos, hemos usado una base como la de la actividad anterior y palillos, donde colgaremos los tapones para que se seque la pintura.
Si tenéis temperas que pueden ser usadas con los dedos, no lo dudéis, ofrecerles también pintar con los dedos, usando el agua y el trapo ahora para limpiarse ellos antes de usar cualquier otro color.
Así tenéis dos alternativas, según les guste o no usar los dedos para pintar. Las pinturas de los dedos se pueden usar sin problemas con pinceles también, así que si adquirís aquarelas para los dedos, podrán usarla como más les guste.
¿Qué os han parecido? ¿Habéis hecho alguna de estas actividades? ¿Conocéis más actividades sencillas con tapones? Contadnos vuestras experiencias.
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