Los padres han dado un paso adelante en la negativa de poner tantos deberes a sus hijos y están dispuestos a ir a huelga si es necesario. La polémica de los deberes está servida: son realmente tan necesarios para el aprendizaje del niño o se podría pasar perfectamente sin hacerlos y desarrollar otras capacidades de los pequeños estudiantes. Nos hemos sentado a pensar que cosas podríamos hacer si nuestros hijos no tuviesen tantos deberes y estas han sido nuestras conclusiones.
Las tardes en casa de Darío se han convertido en una auténtica pesadilla. Desde que empezó el curso ( 3º de primaria) tarda unas dos horas y media diarias en hacer los deberes del colegio. No es un niño cuyo desarrollo intelectual vaya más lento que el resto de la clase. De hecho, su madre preocupada por tener que estar todas las tardes pendiente de las tareas de su hijo ha preguntado a otros papás y el resultado es el mismo: los niños de su clase están entre dos y tres horas haciendo deberes del colegio.
Esto ha hecho que algunos padres se hayan quejado a la dirección del centro por el excesivo número de deberes ( muchos de ellos sin explicar) y porque son los progenitores los que muchas veces tienen que hacer la labor del profesorado para que sus hijos “no se queden atrás”. Entonces hay que preguntarse: ¿Es culpa del sistema educativo actual el hecho de sobrecargar con tareas a los niños? ¿Estamos creando una sociedad tan competitiva que los niños que no puedan seguir el ritmo de ese tren quedarían excluidos de la misma? ¿Es beneficioso para la formación de nuestros hijos este nuevo aspecto en la educación?
Desde @Trucos de mamas nos hemos planteado que cosas podríamos hacer si nuestros hijos no tuviesen tantos deberes y hemos encontrado 9 beneficios para padres e hijos aunque seguramente haya muchisimos más. Nos gustaría además abrir un debate sobre el tema y que nos contaseis vuestra opinión al respecto.
EL JUEGO. Un aspecto importantísimo en el niño es que tenga tiempo para jugar. Con el juego aprende a desarrollar capacidades como la estrategia, el juego en equipo, la colaboración…Sin el juego los niños crean acciones individuales y se apartan de lo que en un futuro tendrán que depender: En un trabajo prima la inteligencia emocional no la individualidad y protagonismo.
2. EL DEPORTE. En nuestro país uno de cada tres niños tiene sobrepeso. La vida sedentaria que llevamos hace que nuestros hijos practiquen cada vez menos deporte. Si a eso sumamos la gran cantidad de deberes diarios las tardes de nuestros niños se reducirán a estar sentados en una mesa, merendar, cenar e ir a la cama.
3. QUEDAR CON AMIGOS. ¿Donde han quedado esas tardes en las que nos bajabamos a la calle o al patio de casa a hablar o a jugar con nuestros amigos? Este espíritu se va perdiendo cada vez más y los amigos de nuestros hijos son practicamente unos desconocidos.
4. DESCANSO PATERNAL. El descanso de los padres es fundamental. Cuando llegas cansado del trabajo no te apetece ponerte con tu hijo toda la tarde a ayudarle a hacer los deberes pero hay muchas cosas que no entienden y nos vemos obligados a pasar esas horas resolviendo problemas y explicando lecciones. Muchos padres lo hemos hablado y hemos llegado a la misma conclusión: ” A nosotros no nos han ayudado y hemos salido todos adelante”.
LOS PADRES TAMBIÉN NECESITAMOS NUESTRO TIEMPO de ocio: ir al gimnasio, al cine o simplemente leer son cosas que se han convertido en casi imposibles para la mayoría de padres.
5. EVITAR LA SOBREPROTECCIÓN DE NUESTROS HIJOS. Estando pendientes de las tareas que tienen que realizar impedimos su desarrollo aunque sea inconscientemente y nos convertimos en “agendas andantes” de nuestros hijos. Nos vemos obligados a estar preguntando continuamente a nuestros hijos que es lo que les han mandado, que hay que hacer y cuales son los próximos exámenes a realizar.
6. EVITAR LA FRUSTRACIÓN DE LOS NIÑOS. El otro día una amiga me comentaba que en la clase de su hija había un niño que nunca llevaba los deberes hechos y que ya le habían puesto varias notas negativas. La profesora le comentó que por qué no los hacía y el niño explicó que sus padres por las tardes trabajaban y que no había nadie que le ayudase a hacer las cosas que no entendía. ¿Esto es justo para un niño?
7. TRANQUILIDAD EN EL HOGAR. Una gran cantidad de deberes genera un cúmulo de sentimientos de rechazo por parte de padres e hijos generando situaciones de tensión, de frustración y de rabia en los miembros del hogar ¿ o no?
8. ACTIVIDADES CON LOS PADRES. El tiempo que muchos padres perdemos en ayudar, o más bien, en hacer los deberes a nuestros hijos podíamos dedicarlo a hacer actividades en común con ellos: salir a pasear, hacer deporte con ellos, ir al cine a ver una película. Actividades que unan a los miembros de la familia y en los que los niños aprendan verdaderamente a disfrutar de los valores de la vida: el amor, la amistad, la alegría….
9. EL DISFRUTAR DE LA VIDA Y LEER, porque la lectura es vida, es disfrutar , imaginar y aprender día a día.
@Trucosdemamás
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