Como siempre aprovechamos las siestas de P para hacer las fichas y trabajar un poco el trazo, las vocales y los números. En principio C se muestra participativa, trae su silla, coge los lápices... pero cuando empezamos con las fichas... No le gustan nada, nada las de repasar puntitos (yo lo entiendo, son muy aburridas) pero es necesario que las haga para trabajar el trazo y que luego la caligrafía sea más sencilla.
Como ya os comentaba en otras semanas, C ha olvidado cómo se traza algunas vocales (al menos las reconoce) y le cuesta mucho los trazos curvos. Así que en cuanto le presento una de estas fichas... empiezan las excusas: "quiero hacer pipí", "quiero agua", "tengo mocos"... y un sin fin de excusas más para levantarse de la silla, lo que consigue ponerme de los nervios y empezar las peleas con ella.
Sé que tendría que haber llevado estas peleas y enfados de otro modo, pero ya el verano va pasando factura y estoy a-go-ta-da. Así que mi paciencia (la poca que por estas fechas me queda) se agota rápidamente.
Aún nos quedan unas cuantas páginas para acabar uno de los libritos que le mandaron en el cole, pero quiero seguir trabajando con ella, ya que en el cole va un poco a duras penas con algunos conceptos. El colegio además en el que está es bastante exigente en primaria (sí, ya sé que queda aún un par de años) y me da miedo que C se encuentre rezagada.
rayuela.org
Sé que los niñ@s van avanzando a su ritmo, que aún es pequeña y que seguro que este año será diferente al anterior y seguramente se ponga al día con sus compañeros, pero como madre me da miedo.
Así que tengo pensado hablar con su maestra para ver en qué puedo ayudarla en casa y hacer actividades (lo más lúdicas posibles) para reforzarla.
¿Me estoy volviendo una exigente? Ay! sólo quiero lo mejor para ella ¿Qué pensáis vosotr@s?
Por cierto, mañana P empieza la guarde. Parece mentira que hace tan sólo 2 años la tuviera entre mis brazos, recién nacida, toda pequeñita y risueña.
Se hacen mayores... ^__^