Estamos conectados las 24 horas del día, los 7 días de la semana y sin darnos cuenta vamos perdiendo nuestra intimidad, dando a conocer nuestro estado de ánimo, mostrando fotos de lo que hacemos, los lugares que frecuentamos y que visitamos, compartiendo publicaciones y noticias que indican nuestro punto de vista y descubren nuestra opinión a diestro y siniestro, … Nos estamos volviendo transparentes.
Esta “continua comunicación” hace que sea relativamente fácil que alguna de estas relaciones se deteriore y pueda llegar a agriarse. En alguna ocasión los malos entendidos, las envidias, …, puede dar lugar al acoso, más teniendo en cuenta que hay quien aún piensa que internet es anónimo.
Te dejo un vídeo donde indica cómo reportar acoso en las principales redes sociales:
Permíteme escribir algunas reflexiones educativas de Antonio Crespillo extraídas de su libro #EdúcameDespacioQueCrezcoDeprisa en cuanto a la importancia de la autoestima:
Los hijos desean sentirse queridos, satisfechos y valiosos. Tus hijos vivirán los valores que practiquéis, no los que prediquéis.
Enséñale que no hay que juzgar, que todos tenemos nuestras rachas buenas y malas. Todos tenemos derecho a equivocarnos, yo también. Nadie es perfecto. (Con qué facilidad olvido esto)
El hijo llegará a confiar en sí mismo si ha experimentado la confianza en sus padres. La indiferencia de los padres mata la autoestima.
Los hijos con una sana autoestima asumen tanto el éxito como el fracaso: de ambas situaciones se aprende.
La sociedad les enseña mucho sobre el mundo exterior, pero cada vez saben menos de su mundo interior. Eso es tarea vuestra.
Debéis conseguir que cada hijo/a se sienta una parte integrante e importante de la familia.
Para terminar, recuerda que nuestra labor de padres no termina nunca.
Libro: #EdúcameDespacioQueCrezcoDeprisa