Cuando cayó en mis manos este libro me sorprendió su título: “Como criar niños felices” y comencé a hacerme preguntas ¿Estoy criando bien a mis hijos para que sean felices? ¿Qué puedo hacer para mejorarlo? Así comencé a leer este libro que explica cómo los daneses crían a sus hijos y porqué se encuentran en los primeros puestos de personas más felices del mundo.
El libro esta escrito por una psicoterapeuta danesa y por una escritora estadounidense, casada con un danés. Pero ¿porqué son más felices los daneses y, por extensión, sus hijos?
La base de todo se encuentra en cinco pilares:
El juego: como base fundamental para lograr la felicidad, el equilibrio y la resilencia en la edad adulta
Desarrollar la honestidad
Redefinir situaciones y verlas de otra manera
Hacer a los niños más empáticos
No poner ultimatum
Reforzar la unión familiar
Una de las cosas que más me ha llamado la atención es que los niños tienen que tener su propio espacio para aprender y crecer. Cuando eramos pequeños recuerdo bajar a jugar a la calle, con otros niños, inventábamos nuestros propios juegos y normas y gestionábamos nuestros éxitos y fracasos.
Ahora tenemos a los niños “recluidos” (la sociedad ha cambiado) y con numerosas actividades frenéticas que marcan su horario, con lo que mermamos su tiempo de jugar, explorar y aprender las cosas por sí mismos.
También el libro habla de como los padres nos lanzamos a una frenética “lucha” para ver qué hijo es el mejor, o como las madres y padres nos estamos juzgando unos a otros (quizás sin darnos cuenta) para ver quién cría mejor a sus hijos. Por ejemplo, a la hora de los cumpleaños; en nuestra época invitábamos a nuestros amigos a merendar a casa unos gusanitos y unos sandwiches; ahora los padres compiten para ver quién celebra el mejor cumpleaños (por ejemplo una compañera me contó que sus hijos fueron invitados a un cumpleaños en el que les recogía una limusina).
Otro punto importante es el tema de la empatía: ¿realmente trabajamos con ellos esta cualidad?. Queremos que sean los mejores, competitivos, los primeros en todo, pero no nos damos cuenta que en su afan de ser los mejores podemos estar frustrándoles o creando personalidades egoístas, puesto que en su camino hacia el éxito que les estamos marcando seguramente no reparen en el daño que pueden hacer a otras personas.
Terapia para madres primerizas
En la sociedad danesa hay una red creada de madres primerizas, en las que se ayudan unas a otras y que comparten inquietudes, información, frustraciones.. Una terapia que sirve para rebajar el estrés que encuentra una madre cuando su vida cambia completamente.
La cultura danesa tiene enraizados estos comportamientos que, para ellos son naturales, pero que yo veo que en nuestra cultura faltan. En mi caso, por ejemplo, muchas veces levanto la voz a los niños cuando estoy cansada o estresada o cuando les he repetido 10 veces que hagan una cosa y no la hacen. Pienso que muchas veces hacemos las cosas sin pensar, y antes de actuar tendríamos que pararnos un momento y ver lo que estamos a punto de hacer.
Quizás he contado muy poco de este libro, podría contar mucho más porque verdaderamente me ha sido útil y comenzaré a compartirlo dentro de mi círculo con personas a las que creo que va a ayudar.
Os recomiendo que lo leáis, y sobre todo que, si estáis de acuerdo con esa filosofía, lo compartáis para entre todos hacer que nuestros niños sean más felices.
Fuente: este post proviene de Trucos de mamás, donde puedes consultar el contenido original.
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