La verdad es que en este mes me han surgido bastantes cosas de las que me parece interesante hablaros pero vamos a ir por partes y a empezar por el principio; El primer viaje (largo) de cachorrito en el coche.
Este año no se en que estábamos pensando cuando se nos ocurrió la brillante idea de irnos de vacaciones a Gerona. Teniendo en cuenta que vivimos en Madrid , nos esperaban ni más ni menos que 741 km, 7 horas y 15 minutos de trayecto sin contar con las paradas pertinentes. No me preguntéis en que estaba pensando cuando decidimos irnos tan lejos por primera vez con el bebé porque ni yo lo sé.
Antes de ir a Gerona íbamos a pasar una semana a Cuenca, de manera que decidimos empalmar ambos viajes e ir de Cuenca a Gerona sin pasar por Madrid para ahorrarnos horas de viaje ( que ya iban a ser suficientes...).
Nos plantamos con dos viajes totalmente distintos uno playa, otro " montaña" , en un sitio calor y en el otro más bien fresquete y por supuesto 15 días fuera de casa, de manera que aunque yo siempre he sido de economizar recursos para no ir cargados como los gitanos, fue totalmente inviable ( o no supe hacerlo). Maletero hasta reventar y carretera y manta.
Sinceramente, cuando fui consciente del porrón de horas de viaje que íbamos a chuparnos me acojoné, pero definitivamente voy a tener que cambiar el nombre al blog y en vez de - un ángel llamado mama - es posible que tengamos que cambiarlo a - un ángel llamado cachorrito -
El trayecto transcurrió tal que así:
Salida 5 AM
Primera y última parada a las 9H
Llegada al destino 12:30H Tras un buen equipamiento de agua, chupetes, juguetes y el ajuste del espejo retrovisor (del que os hablé en este post ), en el cual teníamos muchas esperanzas de que se fuera distrayendo viéndose y viéndonos ya que nadie iba atrás con cachorrito, decidimos salir temprano para aprovechar sus horas de sueño, se despertó sin protestar sobre las nueve y paramos para desayunar todos, cambiar el pañal y estirar las piernas. De nuevo vuelta al coche con otras 3-4 horas por delante y a los 10 minutos de estar tranquilamente jugando se volvió a quedar dormida y así hasta media hora antes de llegar al destino que se despertó y se puso a jugar sin rechistar, y FIN de la historia.
Me quedé alucinada con el tesoro de niña que tengo, se zampó 8 horas de coche prácticamente durmiendo, sin rechistar,sin medio lloro y después esa noche durmió del tirón como de costumbre.
Desde luego que tenía poca fe en ella y me ha dado toda una lección. No suele portarse mal en el coche y es verdad que es de echar pequeñas cabezadas en los trayectos " cortos" , pero para nada me esperaba tener que hacer una única parada porque iba durmiendo plácidamente.
Y la vuelta que tal fue? pues prácticamente igual! solo que con una parada extra, principalmente porque iban cansados los papás.
Otra muestra más de los miedos infundados que de nuevo cachorrito ha tirado por la borda.
¿Cómo llevan vuestros peques los viajes largos en el coche? ¿ Algún otro ángel por ahí?