Vamos a empezar por lo básico, ¿Qué es la niebla?
Son nubes que se encuentran muy bajas, incluso a nivel del suelo, y que se están formadas por partículas de agua de pequeño volumen en suspensión. ¿Bonito, eh? Ahora se lo explicas así a un niño y se queda con cara de, “¿Qué me estás contando?”.
Pues vamos a hacer un experimento muy fácil para entenderlo mejor.
¿Qué necesitas?
Un vaso de cristal
Agua
Un colador
Varios cubitos de hielo ¿Cómo se hace?
1. Calienta bastante el agua y llena el vaso hasta arriba. Espera unos 20 o 30 segundos y vacía la mitad. Lo deberá hacer un adulto ya que el vaso quemará.
2. Coloca sobre el vaso, el colador con los cubitos y espera a que se formen las partículas de agua en el espacio entre el hielo y el agua caliente.
Explicación para los niños:
El agua al calentarse se convierte en vapor de agua (lo que sale de la olla que mamá o papá ponen con agua para hervir la pasta. Ese humillo que sale es el vapor).
Por otro lado, el hielo se derrite con el calor y se convierte en agua que cae al vaso de agua caliente. Al subir el vapor caliente, choca con lo frío, por lo que se produce la condensación. Y es lo que da lugar a las pequeñas gotitas que se quedan flotando en suspensión entre las dos capas.
Espero que disfrutéis de la explicación con vuestros hijos. Su cara, al ver las gotitas, vale la pena.
Fuente: este post proviene de Aprendiendo con Julia, donde puedes consultar el contenido original.
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