A las personas les da miedo los cambios. A mi no.
Una vez fui contratada en una empresa para ser parte de la unidad de manejo de cambio y una de las características necesarias para este perfil es que la persona tenga la capacidad de adaptación y sea flexible ante las situaciones cambiantes. Pero, ¿qué pasa cuando el cambio no te agrada? Entras en un momento de crisis personal y te encuentras con una palabra que últimamente está de “moda”… Tienes que conocer en qué consiste ser Resiliente.
Esta semana estuve en una conferencia dictada por la Liset López y Paola Ynfante, presidente y vicepresidente de Caribbean Women Foundation (CWF) respectivamente, se llamaba “Mujer Resiliente”. Son de esos temas que te caen como del cielo. Fui a esa conferencia a confirmar si de verdad poseo las características de una mujer resiliente. Estoy atravesando una etapa difícil a nivel personal dónde hasta ser madre se ha convertido en todo un reto.
De acuerdo a lo tratado, quiero compartir contigo algunas ideas que anoté en la conferencia, confiando que te puedan apoyar en cualquier momento de crisis y en cualquier aspecto de tu vida, sea personal, laboral o de relaciones.
Aquí te cito algunas frases, y luego de los dos puntos (:), una breve opinión mía:
* Resiliencia no es más que resurgir, adaptarse, superarse y ser felices: me encanta la última, no importa lo que hayas pasado, la meta es lograr volver a la felicidad.
* Es enfrentar la adversidad de forma constructiva: si tuviéramos la capacidad de ver las crisis como etapas de aprendizaje, realmente entenderíamos que puede ser constructivo el resultado.
* Ser resiliente es adaptarse con flexibilidad: no es cuestión de aceptar como obligación y de mala gana, es aprender a disfrutar el proceso de adaptación siendo flexibles y abiertos a los cambios.
* ¿Por qué aguantarse las lágrimas cuando es momento de llorar?: la verdad es que esta pregunta me encantó, pues ser resiliente no es ser frío, calculador, indolente, altanero, orgulloso. No se trata de asumir una posición de ser el más fuerte para que no te vean llorar, sino descubrir que en la vulnerabilidad sigues siendo humano y llorar es un derecho que te pertenece y que además libera tu alma del sufrimiento.
Ahora te dejo algunas ideas ya sin mi comentario para que no tengas que dejar la lectura por lo extensa que puede ser:
* La mujer resiliente reconoce que el sufrimiento es parte de la vida.
* Reconoce sus emociones pero no se deja arrastrar por ellas.
* Tiene capacidad de autocontrol.
* Procura encontrarle sentido sin preguntar “¿Por qué?” y decide preguntarse “¿Para qué?”.
*Sabe identificar lo que necesita como recurso para darle sentido a la situación.
* Reconoce que es más que cuerpo y mente. También es espiritual.
* Reconoce de que el amor y el perdón no son negociables.
* Está orientada al futuro, no al pasado.
* No se maneja por lo que “siente” o “tiene que”, sino por lo que “debe”.
En los comentarios finales de la conferencia se dijeron tantas palabras que para mi significan “salud emocional” que definitivamente encontré lo que fui a buscar, esa confirmación de que poseo las características de la mujer resiliente. He pasado y estoy pasando por etapas que demandan de mi vivir en modo resiliente, desarrollando la capacidad de ver mis propias situaciones desde fuera de mi, como si me mirara otra persona.
Finalmente te dejo un pensamiento de Víctor Frankl que nos regalaron en esta conferencia:
VALE LA PENA VIVIR. VALE LA PENA SEGUIR VIVIENDO. SIEMPRE HAY UN PARA QUÉ.
Feliz fin de semana…