Supongo que ya habréis oído hablar de esta espeluznante noticia en los diferentes medios, este fin de semana. La Asociación Anadir presentó el pasado jueves nate la Fiscalía General del Estado una denuncia por el tráfico irregular de bebés y niños durante los primeros años de democracia en España. Se trata de 200.000 adopciones ilegales, que no sólo constaron a varios eslabones, influyentes y menos influyentes, en nuestra sociedad, sino que jamás salieron a la luz y derivaron, en cambio, en un verdadero mercado negro del que apenas se ha sabido nada hasta ahora.
Aunque se estima que en torno a 1988 este tráfico descontrolado de bebés decayó por varias razones que aún se están analizando, lo cierto es que la Investigación no descarta que estas prácticas hayan continuado ya entrado el año 2000.
Anadir no ha luchado sola en esta causa. La otra gran asociación de víctimas, también conocido como Plataforma de Grupos Afectados de Clínicas de toda España por el caso de' bebés robados', reivindica justicia, aunque no de forma conjunta, si paralela. El abogado de Anadir, se ha atrevido a citar que ''miembros de la Iglesia, hasta médicos y políticos, entre otros, estuvieron 'metidos' en este lio''. ¿Qué os parece, a vosotras? A mi, además de bochornoso y nada propio de un país supuestamente avanzado como el nuestro, me parece que debería zanjarse cuanto antes, por el descanso de las familias afectadas...ojalá sea pronto.
Os dejo con una foto de varios representantes de las familias, cuyos hijos, primos y hermanos dieron por muertos en los hospitales donde nacieron, para traficar con ellos en adopciones ilegales.
Fuentes. La información, elpaís.com
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