Vuelo atrasado por la nieve, ultimo día de vacaciones (puntería la mía para viajar por trabajo) es tarde y los chicos están…están…como decirlo…un poco rompe kinotos.
Los pasajeros sin hijos miran cansados. Las mamás no saben qué hacer. Las azafatas quieren abandonar el barco. Nadie aguanta a nadie.
¿Es posible minimizar los efectos adversos del viaje en avión con los chicos?
Pues sí, y acá voy a sacar chapa de viajera frecuente y de mamá de una niña que cuando mete rabieta la mete a lo Valeria Lynch en su mejor momento.
Mamá toma nota.
– Si nunca viajaron en avión es importante prepararlos y prepararte. Quizás vos nunca lo hayas hecho, así que por más que estés muerta de miedo, acordate que sos la mamá y que en ese momento sos su apoyo. Serenate y los vas a ayudar a bajar la ansiedad. Si no podés y tenés la suerte de viajar con otro adulto, pasale durante el vuelo la responsabilidad del cuidado a él y ocupate de tu stress. Los chicos, el panic a volar y andar pensando si metiste todo en la valija te va a dejar de cama.
– Si es el primer viaje de ellos pero no el tuyo, tenés ventaja. Contales que es lo que va a pasar, que significan las señales y ruidos, cuánto durará el viaje, ponelos al tanto de los detalles, incluso deciles que es normal que a veces el avión se mueva un poco.
– Salvo que hagas un viaje a China, ponele, aun así viaja con lo justo. Situación real a 4 asientos del mío. Madre con dos, uno de 4 y otro de 6 aproximadamente. El padre metido en la tablet con cara de "estoy investigando la cura para el mal de la vaca loca". Ella tratando de contener a los niños con sueño, hambre, peleándose por el celular, dejando de lado 2 libros para colorear, 40 crayones, un San Bernardo recuerdo de Bariloche y 1 caja de chocolates abuela Goye que se les ocurrió abrir en pleno sacudón, uff, acompañado por un HER-MO-SO griterío: "mammaaaaaa Lautaro no me da el blanco". ¿El crayón, el chocolate? ¿Qué blanco? Pregunta el que va 20 asientos adelante porque hasta allá se escucho el reclamo.
1) Señora, usted debe poner los puntos sobre las ies y avivar a su marido para que le dé una mano
2) Todo junto en una butaquita clase turista es imposible, no estamos en el patio de casa. Consensue una opción, UNA, que los mantenga entretenidos un rato, luego pase al plan B. Quizás no haga falta porque ya estarán aterrizando.
3) Si está dentro de sus posibilidades no viaje con el tiempo justo, volver el día anterior al comienzo de clases, a última hora no es bueno para usted, ni para los chicos, ni para la señora paqueta que viaja con su caniche (ahora que se puede viajar con caniches).
4) A los chicos no les gusta la comida del avión (a los grandes tampoco) así que comer algo rico antes de subir le ahorrará dolores de cabeza.
5) Me importa un bledo, si eso un bledo, el resto del pasaje, que se fumen al los chicos en ese estado. Pero piense en los primeros 4 puntos por usted y su salud mental y evite malos momentos.
– No los dejes hacer cualquier cosa. No por el que dirán. Es peligroso. Relajá pero no tanto. Hay una nena de tres que no para de ir y venir por el pasillo solita, saludando a la gente. Muy simpática ella, pero se acaba de dar un porrazo al enredarse con la cortina que separa business del resto de los mortales.
– Sociabilizá con otras mamás del pasaje. Si mamá, a veces es necesario. Si el chico del 29B y el del 14A en vez de andar aburriéndose solos, se aburren juntos es mejor. No te digo invitarlo a jugar a casa, ni armar grupito de whatsapp de las mamis del vuelo 1683, es simplemente improvisar una salida al embole del viaje.
La azafata me pide que apague la compu que estamos llegando, gracias al cielo patrio, no veo la hora de estar en casa.
Y andá pensando en el tema por si te toca la misma travesía el próximo feriado puente.
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