Feliz Segundo Cumpleaños

Querido bebé:

Hoy haces dos añitos. Dos añitos acompañándonos y llenándonos de amor y sonrisas a partes iguales. Dos años de dormir acurrucados, de teta a todas horas y de cansancio infinito.

Me ha pasado igual contigo que con tu hermano, que llevo desde ayer tontorrona. Dándote más besos de la cuenta y abrazos más fuertes, contándote a cada rato qué estaba haciendo hace dos años en esos precisos momentos. Recordándote cuando aún estabas dentro de mi barriga y tú, que aún no entiendes eso, te levantas la camiseta, me señalas la tuya y dices “¿aquí?”, ja ja.

Eres un niño muy especial que nos lo ha puesto muy fácil, aunque quizás también influya que contigo ya no éramos padres primerizos. Te has adaptado a todo. A nuestro colecho de cuatro, a nuestros horarios de locos en verano, a nuestras vacaciones como si no tuviéramos hijos, a ir a la guardería sin adaptación… Muchas veces papá y yo decimos que menos mal que llegaste tú el segundo. Si llega a ser al revés nos volvemos locos, pero no se lo digas.

Imagen de bebé recién nacido


Con dos años ya hablas un montón. Lo llevas haciendo desde hace meses, pero ya cada vez sabes más y más palabras y se te entiende mucho mejor y empiezas a construir tus primeras frases. Eres un preguntón. Lo quieres saber todo: ¿Ónde vamos? ¿Ónde tá? ¿Qué?… Te pasas el día haciendo preguntas o dándonos órdenes, porque mandón también eres un rato. Te apropias de los juguetes de tu hermano y en cuanto te lo quita empiezas a gritar como un poseso “e mío, e mío”.

Tienes muy mala leche. Siempre te tienes que salir con la tuya. Quieres un juguete y lo quieres ya, y si no te lo damos o lo tiene tu hermano te enfadas y apagas la tele, le tiras con lo primero que entallas o vas y lo pellizcas. Si vieras la cara que pones cuando estás tramando alguna travesura… Te tengo que grabar porque es graciosísima, mordiendo al revés, con los ojos echando chirivitas y un atisbo de sonrisa maliciosa. Pocas veces me puedo resistir a comerte a besos cuando te enfadas.

Te encanta ir de paseo. Todas las tardes cuando te pregunto dónde vamos me contestas que “a feia”. ¿Cómo pudo gustarte tanto momtarte en los caballitos y en los coches que aún lo recuerdas a diario? Cuando te digo que a la feria no podemos ir cambias de opción rápidamente: “a paque” “a fente”. Me hace una gracia verte coger los zapatos para que te los pongas y decirle adios a papá…

Te gusta jugar con los niños mayores y buscas continuamente a los amigos de tu hermano. Te sabes todos sus nombres y los llamas a voz de grito mientras te metes en el medio de sus partidos de fútbol diciendo “pasa, pasa, pasa”. Me da a mí que voy a tener otro futbolista en casa, ja ja. A mí, que nunca me han gustado los deportes, voy a tener que soportarlos a todas horas. Tu juego favorito es el fútbol, como tu hermano. Si tienes un balón ya eres féliz, no necesitas nada más.

Todas las mañanas quieres ir al cole con tu hermano. Y lo sigues allá donde vaya. Si el juega a la pelota tu quieres esa misma pelota y si tu hermano se pone a dibujar quieres dibujar en el mismo papel. Pero también te entretienes mucho solo. Te vas a la habitación y eres capaz de estar un cuarto de hora sin dar señales de vida. Hasta que has desmantelado la habitación por completo, ja ja.

Tu hermano te quiere mucho aunque cada vez te soporta menos. Has dejado de ser el bebé que no se movía de dónde lo pusieses para quitarle todos sus juguetes y libros. Tiene que ser difícil de digerir, no te creas. Sin embargo, te cuida un montón. Está pendiente en todo momento de ti y lleva unos días emocionado ayudándome a preparar tu fiesta de cumpleaños. No quiere que veas nada, para que sea una sorpresa, pero a la vez está deseando de enseñarte las cositas.

Eres un niño muy guapo. Mi rubio de ojos verdes y sonrisa infinita. Un niño que está siempre alegre, que apenas llora ni aunque se haya abierto el labio, un niño que sonríe con la mirada casi tanto como con la boca. Un niño que vino a desmentirnos eso de “todos los niños son iguales” porque no lo son.

Gracias por elegirnos como familia, mi vida. Ya sabes que te quiero hasta el cielo (aunque tu seas un malote y cuando te lo digo me repliques “a celo no, a suelo”).

Feliz segundo cumpleaños, mi bebé precioso.

Fuente: este post proviene de Madre Agua, donde puedes consultar el contenido original.
¿Vulnera este post tus derechos? Pincha aquí.
Creado:
¿Qué te ha parecido esta idea?

Esta idea proviene de:

Y estas son sus últimas ideas publicadas:

Felices 26. Carta para el futuro. ¡Felices 26, mi querido bebé¡ Hoy haces 26 meses, mi rubio de ojos verdes que nos ha robado el corazón a todos con esa carita de ángel y esa sonrisa todo el día puest ...

Recomendamos