Bueno, ya estamos acabando el taller y nos quedan solo dos ejercicios más: el de hoy y el de la semana que viene. ¿Cómo has llevado los demás ejercicios? ¿Qué cambios has notado en la relación con tus hijos?
Hoy, más que un ejercicio, quiero ofrecer una herramienta para aquellos momentos en que tenemos mil cosas que hacer, que necesitamos que los niños "colaboren" y que no desmonte por detrás lo que acabamos de montar.
¿Te ha pasado alguna vez que justo el día que más prisa tienes es el día que tus niñ@s hacen más travesuras?
Seguramente sí te ha pasado, y resulta que sí que lo saben. Los niños captan las emociones mejor que nadie y se contagian de ellas. Eso es debido a la existencia de las neuronas espejo, que todos tenemos, y que se encargan de "imitar" la emoción. Así que si ven nerviosismo, ellos se pondrán nerviosos, si tu vas acelerada ellos se acelerarán....y no sé los tuyos, pero los míos acelerados dejan a atrás al coyote y al corre caminos.
Por otro lado, resulta que cuando tenemos tantas cosas que hacer la tendencia que tenemos es "Lo hago sola, rápido, a los niños los pongo a jugar aquí y yo voy limpiando por allá...", o trabajando, o lo que sea... Y los niños no se sienten incluidos. Saben que algo se cuece, te notan nerviosa y con prisas, se empiezan a poner nerviosos ellos también, y entonces su conducta empieza a "actuar" para lograr captar tu atención con el objetivo de comprender lo que está ocurriendo, se sentirse incluido y así sentirse mejor. Pero en esa búsqueda de su objetivo puede hacer cosas que no son adecuadas y que a ti, justo ese día con toda la faena que tienes, te siente fatal, y al final, acabe llegando el grito, o una mala contestación.¿Se puede evitar este tipo de situaciones?
Bien, si has ido haciendo los ejercicios del taller seguramente logres controlar los gritos en muchísimas ocasiones pero quizá sean estas que he descrito las que aún te cuesten. Puede que no, pero de todas formas este truco te puede ir muy bien para cualquier situación "
TRUCO PARA SITUACIONES COMPLICADAS.
Antes de empezar a hacer tus tareas, juega con los niños.
Así, tal y como te lo digo. si has de hacer algo importante y necesitas que los niños estén lo máximo tranquilos posibles juega primero un rato con ellos.
Después, explícales que vas a hacer una cosa (lo que sea que vas a hacer, dales detalles si es posible) que es importante para ti, pregúntales qué quieren hacer ellos mientras tanto (jugar con muñecos, dibujar), dónde quieren estar en una habitación o en el salón, etc. De esta manera, estás haciendo que se sientan incluidos y tenidos en cuenta. Además, ellos están decidiendo qué van a hacer y de esa manera lo harán con más ganas e implicación.
Si es posible, inclúyelos en tu actividad y pídeles ayuda.
Pídeles ayuda a hacer lo que tengas que hacer durante un rato si es posible. Se cansarán rápido pero habrán saciado la curiosidad de saber qué estás haciendo y se irán a jugar. Además, de nuevo se sentirán incluidos y tenidos en cuenta.
El sentimiento de pertenencia es una necesidad de todo ser humano de sentirse parte importante de un grupo. Sentir que no importas es una de las peores sensaciones que existen ¿verdad? Los niños, si no se sienten importantes para su familia, para sus amigos (cuando son más mayores) o para su grupo de clase, lo viven con angustia y tristeza, pero como son luchadores intentan buscar ese sentimiento a través de su conducta, casi siempre equivocada en los más pequeños. Alrededor de este sentimiento de pertenencia gira la educación con disciplina positiva (puedes ampliar la información sobre la disciplina positiva en este artículo que escribí).
Cosas a tener en cuenta....
La edad de tus hijos.
Antes de los 3 años los niños necesitan mucha supervisión y compañía. No vas a poder hacer grandes tareas mientras que el/la peque se entretiene sol@ porque lo más habitual no es que un niño de 2 años se entretenga solo. La frase despectiva que corre por ahí "este niños no se entretiene con nada" como si un niño de 1 año debiera entretenerse solo como si tuviera 40, hay que quitársela de la cabeza. Cada niño tiene su ritmo a algunos jugarán más o menos rato sin la presencia de un adulto a su lado, pero los tiempos no son muy largos así que lo mejor es no crearnos demasiadas expectativas y pensar que mientras que ellos juegan nosotros podemos trabajar una hora seguida y sin interrupciones.
A partir de los 3 años los niños van necesitando menos supervisión y les empieza a gustar ponerse en sus lugares favoritos para jugar, pero no nos volvamos locos que más de media hora "completamente a su aire con sus juguetes" no es tampoco lo más habitual.
El tiempo que le vas a dedicar a la tarea que tienes que hacer. No es lo mismo que tengas que hacer algo durante media hora, a tener que hacer algo durante 3 horas. Si necesitas trabajar, limpiar o hacer cualquier actividad que dure más de 1 hora, lo mejor es que hagas pequeñas pausas en tu trabajo y que entre medias incluyas un juego. Si estás mucho rato seguido sin prestarles atención ellos te la reclamarán. Como lo más normal es que tu no dejes de hacer lo que estás haciendo a la primera, al final tendrán que utilizar tácticas "más escandalosas" para lograr tu atención. Así que anticipante y dales atención antes de que ellos la necesiten urgentemente porque se sienten "apartados".
De nuevo, no te olvides de incluirlos en la decisión del juego, en darle opciones, pedirles ayuda, contarles lo que estás haciendo y porque lo haces. Los niños son muy receptivos cuando hablamos con sinceridad y respetan mucho lo que tenemos que hacer si nos gusta y se lo explicamos con total sinceridad. En un artículo de la serie "por qué los niños se portan mal" expliqué la importancia de la honestidad en la educación de los niños (puedes leerlo haciendo click), puesto que ellos no quieren que seamos perfectos.
Te voy a poner un ejemplo. Los viernes voy a bailar una hora por la tarde y a los niños les expliqué qué iba a hacer, a que hora sería, como se llamaban las clases de baile ( lo cual les hace mucha gracias porque lo que hacemos es Zumba así que el nombre les parte de risa), con qué otras mamás del cole iba a ir, dónde lo hacíamos, y las ganas que tenía de hacerlo. Así que las tardes de los viernes necesitábamos ir un poco más rápidos haciendo la compra de la semana (es que es nuestro día de compra, jajaja) y duchándose para que yo pudiera llegar puntual al "zumba".
Todos los viernes transcurren con normalidad, ellos estaban encantados de que me fuera a divertirme y nunca me han dicho que no me vaya ni nada por el estilo. Hubo un día que mi marido se olvidó que yo tenía baile y no llegó a tiempo para quedarse con los niños y me enfadé, y mi niño mayor le dijo a su padres: "Es que la mamá está enfadad porque le gusta mucho el zumba y tu no has llegado a tiempo para quedarte con nosotros". Así, con toda la tranquilidad del mundo hizo de mediador mi peque con 5 años que tenía y su padre dijo "pues es verdad, perdón por llegar tarde". jajajajajaja.
Con esta historia, que es una chorrada, quiero transmitirte que cuando demostramos a los niños con sinceridad lo importante que es algo para nosotros ellos lo respetan y colaboran en que podamos hacerlo, porque se sienten felices por vernos felices. Por ejemplo, con el trabajo me pasa lo mismo. Muchas noches tengo que trabajar en el ordenador y a ellos les he explicado lo importante que es para mi y nunca han tenido problemas para ir a dormir ni han intentado eternizar el momento para que no me fuese al ordenador a trabajar. ( No me ha pasado lo mismo con la limpieza, ves, y es que claro, a mi limpiar no es algo que me apasione y supongo que no les convence mi rollo de que la casa limpia y bonita es mejor....).
Así que, resumiendo, si tienes que hacer algo con ellos, sea lo que sea ten en cuenta:
Explicarles qué vas a hacer y porqué.
Incluirlos y hacerlos sentir importantes.
Dedicarles tiempo para ellos antes (jugar con ellos es lo mejor).
Pedirles ayuda si es posible.
Si tienes que trabajar durante mucho rato, hacer pausas para prestarles atención y jugar a algo.
Tener expectativas realistas.
Pedir ayuda externa si necesitas pasar demasiado tiempo haciendo una tarea (alguien que se encargue de estar con ellos mientras tu trabajas, que los lleve al parque, etc).
Con este resumen llegamos al final del taller de hoy. Si quieres más ideas y trucos para organizarte con los niños (que por cierto, ya queda muy poquito para las vacaciones y esto lo necesitamos) aquí tienes el artículo de Ana, mamadeverdad, que nos ofrece muchas más ideas para organizarnos con ellos en casa y el trabajo o las tareas que tengamos que hacer.
Ya sólo queda el de la semana que viene, será el último, se llama "¿Tienes 5 minutos para ti?" y en él te voy a explicar la importancia del autocuidado, a intentar convencerte de por qué tú eres lo más importante, por qué primero tú y después tu hijos (cómo en los aviones que piden que se pongan la mascarilla primero y luego a los niños).
Muchas gracias por acompañarme todas estas semanas y compartir los talleres de los lunes ¿Me ayudas con este?
¡Te estoy muy agradecida!
Un abrazo apretado.
Fuente: este post proviene de Educar para el futuro, donde puedes consultar el contenido original.
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