Después de triunfar en Navidad con el Nougat Glacé que aprendí a hacer en el workshop de postres navideños de Albal y Madresfera, he decidido tirarme a la piscina y para fin de año hacer una nueva receta de la chef Iria Castro. Y en esta ocasión me voy a decantar por la pastela árabe, ya no solo por su sabor, que es espectacular, sino porque me parece un postre preciso y sé que va a encantar. Aquí os dejo la receta por si os animáis.
INGREDIENTES
Para la base de la pastela:
Hojas de brick
Aceite de oliva para freír
Azúcar glass
Para la crema pastelera:
450 ml leche
150 ml nata líquida
40 gr de maizena
1 vaina de vainilla
140 gr azúcar
60 gr mantequilla
6 yemas de huevo
1 huevo
2 cucharadas de café soluble
PREPARACIÓNPrimero nos ponemos con la crema pastelera. Para ello hervimos la leche con la nata y las vainas de vainilla. Mezclamos el azúcar con las yemas los huevos y la maicena. Vertemos el líquido caliente sobre la mezcla de huevos y unificamos bien. Volvemos a poner al fuego a hervir. Cocemos 3 minutos más y rápidamente lo traspasamos a un bol fuera del fuego y batimos enérgicamente con la mantequilla fría.
Dividimos la crema pastelera en dos partes e incorporamos las 2 cucharadas de café soluble a una de ellas mientras la crema aún esté caliente.
A continuación freímos, en abundante aceite, las hojas brick, una a una para que no se peguen. Retiramos y reservamos sobre papel de horno (mejor si es Albal) para que reposen y se absorba el exceso de aceite.
A la hora de montar el pastel disponemos las capas de la siguiente manera: Hojas brick de dos en dos, extendemos encima la crema pastelera de café con ayuda de una manga pastelera, de nuevo 2 hojas de brick, volvemos a extender crema pastelera y por último 2 hojas de brick y coronamos el pastel espolvoreando azúcar glass.
Entre las ambas capas de crema se puede poner una de turrón de Jijona desmigado, pero creo que yo me voy a saltar esa.
¡¡¡FELIZ MARTES!!