Por fin retomamos el blog y esta sección que tanto nos gusta. Hoy tenemos como invitada a Val, la creadora de la revista Mi Guía Hispania, con quien tengo el placer llevar colaborando ya algún tiempo. Val es mexicana y madre de tres hijos. Una mujer emprendedora y expatriada en Alemania, que combina su desarrollo profesional con la maternidad en Alemania. ¿Cómo lo consigue? ¿De dónde surgió la idea? Hoy nos lo cuenta, con uno de sus hijos entre las manos y disculpándose amablemente de antemano por las posibles interrupciones que – debido a esta circunstancia – podamos tener. Conciliación, bonita palabra.
Una breve presentación…
Mi nombre es Valentina Vaca Sánchez. Soy mexicana y llevo 10 años viviendo y sobreviviendo en Alemania. Soy madre de tres hijos; una niña de 9, un varón de 6 y otro varón de 5. Me dedico al Marketing y soy la persona detrás de la revista Mi Guía Hispania.
¿Qué fue lo que te trajo a Alemania y cómo se desarrolló tu integración?
Yo no tuve una buena integración a mi llegada. Creo que ésa es la principal razón de que hoy me dedico a la revista. Pero respondiendo a tu pregunta, el motivo que me trajo a Alemania fue el amor. Estaba convencida de que quería hacer mi vida con mi pareja de aquel entonces, que ahora es mi marido. Llegó un momento en el que tuvimos que decidir dónde íbamos a construir nuestra familia, y optamos por comenzarla en Alemania.
Cuando aterricé en Alemania para quedarme, ya venía embarazada. Pienso que eso llevó a que muchas cosas no salieran como las habíamos planeado. Como madre, tenía la responsabilidad de mis hijos. Sin embargo, también tenía la ambición como mujer de sacar adelante mis proyectos. Me eché muchas cosas en el saco y creo que por eso hubo cosas que no salieron bien. No tenía las herramientas suficientes para hacer las cosas como me hubiese gustado. Por ejemplo, en aquel entonces hablaba muy poquito alemán.
¿Cuánto tiempo te llevó aprender el idioma?
Pues creo que lo sigo aprendiendo. En este sentido el hecho de ser madre te ayuda también a practicar con tus hijos y a dedicarte más al idioma de forma espontánea en tu día a día.
¿A partir de cuándo empezaste a sentirte en Alemania como en casa?
Es una buena pregunta. Realmente, sentirme en casa siempre me he sentido en casa. Pero no por el hecho de estar Alemania, sino porque los cimientos de mi familia están aquí. Si hubiésemos construido nuestra familia en Omán, creo que también me hubiese sentido en casa allí.
¿Cuándo te incorporaste al mundo laboral en Alemania?
Como he dicho, nunca lo solté realmente del todo. Y esto pienso que, a lo mejor, fue un error. Con el tiempo, me he dado cuenta de que hay temporadas y etapas para todo, y eso es lo que yo no sabía. Ahora con la experiencia, me doy cuenta de que había que tomar las cosas una a una, o quizás dos a dos. Pero no de veinte en veinte.
¿Cuál fue la principal barrera que te encontraste?
El idioma y la burocracia. La burocracia, en el sentido de aprender la forma de hacer las cosas. Y también el porqué de hacer las cosas así. En este sentido, hispanos y alemanes somos muy diferentes. Aprender el know how alemán y no sólo conocer el cómo lo hacen sino también el porqué lo hacen así, me resultó muy difícil.
Durante todo este tiempo de vivencias en Alemania, ¿cuál es la mayor dificultad a la que te has tenido que enfrentar?
Creo que todos los días me enfrento con una nueva dificultad, sobre todo cuando tienes tantas cosas que hacer. ¿Cómo lo supero? Pues es que tengo un gen de superwoman que me ha marcado mucho el ser como soy. La educación que yo tuve desde casa fue que las mujeres pueden. Haber tenido una madre feminista que se tuvo que enfrentar a muchas dificultades y las supo batallar, me hizo ser más “luchona”. Realmente creo que de ahí viene todo. Ha habido muchas dificultades a las que que me he tenido que enfrentar durante estos años y no podría especificar una.
Después de tantos años aquí y ya con tu familia, ¿sigues viajando regularmente a tu país de origen?
No. Creo que mis hijos son todavía muy pequeños. Además, somos una familia de cinco y la verdad es que no se muy bien como pordríamos hacerlo. Quizás cuando sean más grandes.
¿Qué es lo que aún sigues echando de menos de allí?
La comida. Mi profesión frustrada es la cocina y me hubiese encantado haber trabajado como chef. Seguro que ya tendría mi cadena de comida mexicana desde hace años [risas].
Eres la creadora de Mi Guía Hispania, cuéntanos un poco sobre tu proyecto.
La semillita se clavó dentro de mí cuando tuve la primera experiencia real sobre la necesidad de entender cómo funcionan las cosas en Alemania. Esto ocurrió durante mi primer embarazo en Alemania, cuando aún no hablaba nada de Alemán.
La idea es tratar de destacar a todas estas personas que han logrado hacer algo relevante aquí en Alemania. A pesar de tener todo en contra. Barreras como el idioma, pero también barreras interculturales. Esto me llevó a querer crear un medio de comunicación para nosotros, los hispanohablantes.
¿Con qué objetivos?
Nuestro objetivo es ayudar a salvar en lo posible la barrera del idioma – la revista se escribe en español y se traduce al alemán -. Y apoyar en la inserción de los miles de hispanohablantes que cada año llegan a Alemania. Además, damos visibilidad a aquellos que ofrecen sus servicios o productos a la comunidad hispana. Además, también tenemos un objetivo comercial, obviamente.
Respecto a nuestro objetivo social de ayuda a la integración. No sólo nos centramos en la parte hispana, sino que también nos dirigimos a esa parte alemana que también debe conocer cómo se puede integrar con nosotros. Intentamos que conozcan un poco mejor nuestra cultura y el porqué pensamos y actuamos como lo hacemos. Es por eso que siempre tuve claro que la revista debía escribirse en dos idiomas, el de nuestro país de origen y el de nuestro país de acogida.
¿Qué va a encontrar el lector en ella?
Desde aquí os invito a todos a que nos visitéis. Bien en la web de Mi guía Hispania o en las redes sociales. Estamos en Facebook y Instagam. Encontraréis temas de todo tipo: emprendimiento, educación, ocio, maternidad en Alemania, entre otros. Y si os interesa, os podéis suscribir para recibirla en casa.
Volviendo a tu faceta como madre. Ser madre de tres niños y sacar adelante tu propia empresa no debe ser fácil. ¿Cómo consigues el equilibrio?
El principal error que cometí al inicio, fue pensar que podía con todo. Y de esto he intentado aprender. Cuando tienes un perfil muy maternal, muy de quedarte en casa con tus hijos, entonces está todo perfecto si eso es lo que te hace feliz. Pero a mi no me hacía feliz “sólo” eso. Entonces intenté hacer todo lo posible para continuar con mis proyectos a la vez que lo compaginaba con mis responsabilidades como madre, y eso es muy complicado.
¿Cómo consigo el equilibrio? El equilibrio te lo tienes que recordar tú a ti misma todos los días. A mi me ayudó adaptarme a los horarios alemanes. Hacer todos los días una lista con las cosas que he logrado. (Yo tengo como ochenta calendarios repartidos por todos lados en la casa). Hay que administrar muy bien los tiempos para evitar enredarte en los detalles. A mí personalmente me ayuda mucho salir a hacer cursos, interactuar con gente. Yo soy una persona muy social y conocer gente de otros ámbitos me parece súper importante.
Cuando estás muy orientada a tu profesión, esto siempre va a saltar. Es importante reconocerlo, aceptarlo y ver de qué forma puedes trabajar con tu entorno directo. Con tu familia y con tu pareja, principalmente. Ver si lo apoyan. Es importante tener claro qué es lo que tú quieres para poder hacérselo saber a los demás.
Todo inicio es difícil. Al principio no funcionó porque como te explicaba, quise hacerlo todo al mismo tiempo. Creo que debería haberme dedicado a crear mi nido primero y sentar las bases de mi desarrollo profesional en Alemania después. Siempre le digo a todas las mujeres que conozco que son profesionistas que se puede todo pero no al mismo tiempo.
¿Cómo sacas tiempo para ti? ¿Lo consideras importante?
Pues justo haciendo lo que me gusta, es la mejor forma. Siempre defiendo mi tiempo a capa y espada. Tienes primero que defender tu tiempo y así lo sacas.
Es importante porque si no te vuelves loca y terminas frustrada. Terminas como he visto muchas mujeres: gordas, feas y descuidadas. Quizás fueron muy exitosas de jóvenes en sus carreras, pero tras casarse y tener hijos, se abandonaron. Y ya quizá ni siquiera estén felizmente casadas. Sobre todo, mi consejo es luchar siempre por tu independencia financiera.
¿Qué consejo le darías a otra mujer que quiera iniciarse con su propio proyecto?
Pues que tenga claro el porqué quiere lanzarse con un proyecto. Te puedo decir que el 20 por ciento puede ser dinero, pero tiene que haber algo más. Debe de tener ganas de hacerlo, de tener repercusión y querer hacerlo bien. Porque para hacerlo a medias, mejor no hacerlo. Hay que hacer las cosas bien y tratar de pensar todos los días la manera de mejorarte. Preguntarte por las noches, antes de ir a dormir, qué hice hoy para avanzar un poco más. Yo sé que hay muchas mujeres a las que les domina la desidia y que no tienen ese poder de organización. A ellas les digo, paciencia. No es fácil ni se aprende tan rápido. Sobre todo cuando tienes hijos. Creo que es un proceso.
¿Con qué ayuda cuentas?
Respecto a las ayudas financieras, me las he apañado por mi cuenta. Y respecto a las ayudas emocionales, que son las que más cuentan cuando estás comenzando, me valgo de colaboraciones por medio del networking estratégico y también de la familia.
Yo diría que para lanzarte a un proyecto tienes que tener primero muy clara tu estrategia de red de apoyo. Sobre todo si eres madre. Quién está ahí para apoyarte y para que tú puedas conseguir tus objetivos. También añado que no debes aspirar a objetivos muy altos en poco tiempo. Tienes que tener objetivos realizables y realistas, porque si no vas a fallar. Te vas a frustrar y te vas a quedar a mitad del camino.
Hace unas semanas emprendías una iniciativa llamada Gewalt gegen Frauen. Algo así como Violencia de género.¿Cómo surge esta iniciativa y a quién va dirigida?
Hemos notados un incremento de la violencia doméstica dentro de los hogares en los últimos años. Obviamente, independientemente de la nacionalidad. Aunque observamos que el problema se agrava con el choque cultural que se vive en parejas biculturales. El objetivo es dar a conocer el problema. Crear consciencia. Y por supuesto, informar, informar e informar. La difusión la estamos llevando a cabo a través de las redes sociales con nuestros propios recursos.
La idea surgió porque yo también tuve mis diferencias en mi matrimonio. Los niños, los temas financieros, mi inquietud por prosperar profesionalmente y la falta de tiempo fueron, entre otros muchos factores, los que nos influyeron. Eso me llevó a tener una separación dentro de mi matrimonio. Once meses de infierno, de pasar por una experiencia en carne y hueso donde noté muchas cosas. La falta de información que se tiene, entre otras. Una vez más, pude comprobar lo diferente que funcionan este tipo de cosas aquí en Alemania.
Pues con esta magnífica iniciativa cerramos la entrevista. Muchas gracias Val por tus consejos y por compartir tu experiencia como madre emprendedora en Alemania con nosotros. Estos segura que tu testimonio nos servirá a muchas de inspiración. Muchas suerte en tus proyectos y ya sabes donde nos tienes siempre que nos necesites.
Y si te has quedado con ganas de más, Alba de Düsseldorf lleva Umlaut e Isabel de Immatranslates te continuarán inspirando.
¿Te gustaría preguntarle algo más a Val? No lo dudes y ¡deja aquí tus preguntas!
Si te gusta el blog y no te quieres perder ninguna entrada, escribe aquí tu dirección de correo electrónico y te enviaremos cada nueva publicación. Además, recibirás totalmente gratis nuestro eBook con las preguntas más frecuentes sobre Elterngeld, Kindergeld, Elternzeit y Mutterschutz.¡Gracias!