Entrevista con Alberto Payo (Parte II): “Creo que se debe seguir una regla por encima de todo: usar el sentido común. ”
En esta parte de la entrevista con Alberto Payo, periodista especializado en nuevas tecnologías, profundizamos en los nuevos retos que afrontan los padres y tutores al tener que educar a sus hijos en la era del smartphone, tratando de concienciar a sus hijos en el uso responsable de la tecnología.– ¿A qué edad crees que es recomendable iniciar a un niño en el uso de dispositivos conectados?
– Hace algunos años te habría dicho que cuanto antes mejor, pero hoy en día creo que los padres deben ser prudentes. Los psicólogos y pediatras coinciden en que los niños deben desarrollar una serie de habilidades motoras y físicas, antes de ponerse frente a una pantalla. No es cuestión de prohibir y volver a la caverna. Pero tampoco se puede comprar un smartphone a un niño de 5 o 7 años, eso es una salvajada. Hay que aumentar su exposición poco a poco, en base a sus etapas de crecimiento, con límites y siempre con la supervisión parental.
– ¿Qué tipo de contenidos buscan y consumen los niños y adolescentes en internet?
– Seguramente de todo. Google da respuestas a todo en 1 segundo. Los niños buscan respuestas en Internet en lugar de preguntárselas a sus padres o sus hermanos, como hacíamos antes. El problema es que el SEO no siempre les ofrece las mejores respuestas o las más adecuadas para su edad.
Si algo define a la generación Z es el consumo de memes y GIFs animados, vídeos musicales, series, videoblogs de sus youtubers favoritos, stories y más stories de Instagram y herramientas de preguntas y respuestas. Además, les encanta poder disfrutar de juegos de battle royale como Fortnite y de ver cómo otros juegan (eSports).
– ¿Cómo crees que influyen las redes sociales en los adolescentes?
– Ciertas redes sociales, por su dinámica y configuración, fomentan la comparación, los complejos, el aislamiento y crean adicción. Algunos ejecutivos de Silicon Valley han pedido perdón por los trucos psicológicos que se han usado para fomentar su adicción a estas plataformas.
Pero también los ayudan a expresarse libremente, a defender causas sociales, encontrar su identidad, los hacen sentirse acompañados y los ayudan a conocer a otras personas con gustos similares.
– ¿Qué papel tiene la educación y la concienciación en esta prevención? ¿Habría que hacerlo desde el hogar? ¿Desde la escuela?
– Uno muy importante. Es la base de todo. Hay que educar en valores y siendo conscientes de los riesgos. El problema es que para que los padres y los profesores los transmitan, antes deben haberlos comprendido ellos. Actualmente hay asociaciones, compañías de tecnología y entidades como la Policía y la Guardia Civil que dan charlas y cursos por los colegios e institutos para concienciar sobre los riesgos y amenazas que presenta la tecnología para los más jóvenes. Teniendo en cuenta que las TIC se han convertido en algo muy transversal e indispensable para los adolescentes, quizás debería existir una materia específica o alguna unidad temática en los programas lectivos que tocara estos contenidos.
– ¿Qué pautas educativas habría que seguir para asegurarnos de que nuestros hijos hacen un uso responsable de la tecnología y las redes sociales?
– Creo que se debe seguir una regla por encima de todo: usar el sentido común. No tiene sentido que los padres se preocupen por inculcar en sus hijos un uso responsable de la tecnología, pero no se planteen si el que hacen ellos es apropiado. Es muy común que muchos adultos expongan a sus hijos menores en las redes sociales. Compartir sus fotos o vídeos de manera pública con su cara, e información es peligroso. Los padres solo deben pensar si dejarían entrar en su casa a cualquiera. Lo mismo debería aplicarse al uso de Internet.