Podemos pasar todo el día con ellos en casa, inventando juegos o planeando algo divertido, pero si os apetece dar una vuelta, podéis llevar a vuestros peques a una piscina de bolas. Es un lugar muy divertido, donde pueden jugar con más niños. Además, no corren ningún peligro puesto que las bolas blanditas evitan muchos golpes y suele haber también monitores para cuidar de ellos. Muchas piscinas de este tipo se encuentran en los centros comerciales, por lo que podéis aprovechar para dar una vueltecita vosotros también.
Si no os gustan las piscinas de bolas, o vuestros hijos son todavía muy pequeños, podéis optar por el plan que os ofrecimos hace dos semanas, ir al cine y ver alguna película destinada para los niños. Lo importante es tener una alternativa a la larga tarde de lluvia que nos espera este fin de semana...
¿Qué tenéis pensado hacer con los peques?
Imagen: Larissa Olivieira/flickr