Pros de la leche materna
La lista de gastos que se suman en el hogar tras la llegada de un nuevo miembro a la familia son muy numerosos, por esta razón, poder reducir de esta lista, el presupuesto que implica la compra de la leche artificial y cuyo coste suma una cifra importante en un año, es una perspectiva muy beneficiosa para el bolsillo. El ahorro es una buena meta de familia.
Todavía más cuando tomas conciencia de que no solo te compensa el ahorro, sino también, todos los beneficios de salud. Por ejemplo, la leche materna alimenta el sistema inmunológico del niño cuyo nivel de respuesta frente a posibles dolencias es mayor. Por otra parte, esta alimentación natural también permite al niño dejar de tomar por sí mismo cuando ya está saciado. Por el contrario, con el biberón suele ocurrir que se le anima a que termine hasta el final. Es decir, el bebé puede regular mejor de un modo natural sus propias tomas. Todo ello, además, sin tener que desvelarte por la noche al no tener que preparar biberones en la cocina.
Aquellos adultos que durante su primera infancia fueron alimentados con leche natural son menos propensos a tener kilos de más. Desde esta perspectiva, los beneficios de la lactancia materna se notan incluso en esta etapa de madurez.
Cuando un bebé llega a la familia, surgen nuevas relaciones interpersonales. Los espacios de lactancia también favorecen el encuentro emocional de madre e hijo. Cada uno se acostumbra a la presencia del otro y este vínculo de autoestima mutua es un gran aliciente de vida.
La lactancia materna también es un ingrediente para la madre puesto que quienes alimentan de este modo a sus bebés, también pierden antes los kilos acumulados durante el embarazo. Esta rutina también es un protector frente a algunos tipos de cáncer, por ejemplo, de mama o de ovario.
Contras de la lactancia materna
En el momento de incorporarte a la oficina puede resultar especialmente complejo continuar con este método de alimentación si en tu centro de trabajo no hay espacios especialmente programados para la lactancia. Algo que aunque resulta ideal, todavía es muy poco frecuente en el sistema laboral actual.
Además, todas las dudas sobre la lactancia también producen un estrés que afecta incluso al estado de ánimo de la madre que, en muchos momentos puede sentirse desbordada por tantas ocupaciones. Pero además, esta dependencia del bebé hacia la madre también puede alimentar el cansancio femenino en una etapa tan intensa.
Es decir, la lactancia materna produce más pros que contras pero cada decisión es propia.