Hacer que los niños coman bien es muy importante, pero tiene bastantes complicaciones. No consiste en obligarles a comer, sino en inculcarles el hábito de comer alimentos saludables de forma que a ellos no les cueste, creando formas nuevas de comer ciertos alimentos, hasta que se acostumbren. En este reportaje, os damos algunas recetas divertidas y nutritivas para niños para conseguir que a vuestros les guste comer.
Recetas divertidas y nutritivas para niños: muñecos de huevo
Uno de los alimentos que más rechazan los niños es el huevo. Es una fuente de proteinas vital para el adecuado desarrollo de los niños, así como una fuente vital de energía. Además, es una comida muy saciante, básica para aquellas madres que se preocupan por si la comidan que dan a sus hijos les alimenta adecuadamente.Una forma divertida para conseguir que los pequeños coman huevo, son estos sencillos muñecos de huevo. Se trata de una mezcla de palitos de cangrejo, huevo y mayonesa con una presentación espectacular, que hará que los niños estén encantados de comer huevo. En este vídeo podéis ver cómo hacerlos, paso a paso.
Recetas divertidas y nutritivas para niños: zoo de verduras
Otro de los alimentos típicos que los niños no quieren ni probar son las verduras. Está demostrado que en la mayoría de los casos, el consumo de frutas y verduras en niños y adolescentes es insuficiente. La ingesta diaria de estos dos alimentos debería ser de cinco veces al día, pero es cierto, que muchas veces cuesta bastante que apenas coman un plato de verdura.A veces el truco está en la forma de presentación de las verduras. Tendemos a elaborar las mismas recetas o simplemente hacer un puré para que a los niños les cueste menos, pero a veces es necesario crear recetas divertidas para conseguir que los peques se sientan más atraídos por las verduras, como es el ejemplo de este zoo de verduras, una manera sencilla de conseguir que coman de todo y además se diviertan.
Recetas divertidas y nutritivas para niños: cerditos de cacao
Por último, y, aunque parezca mentira, a algunos niños la comida que más les cuesta hacer es la merienda, bien porque están jugando y no les apetece para, bien porque no están completamente saciados después de la comida, o, simplemente, porque son niños a los que no les gusta comer.Lo primero que hay que saber es por qué no les apetece merendar, porque pueda que les demos demasiada comida a la hora de comer, pero si el problema es que al niño no le gusta casi ningún alimento, podemos intentar proponerle recetas divertidas para llamar su atención. Un ejemplo son estos riquísimos cerditos de cacao, son muy sencillos de hacer y los niños se los comen encantados. Además, un poquito de chocolate de vez en cuando nunca viene mal...
Agradecimientos: todas las imágenes son del canal de padres de facilisimo, en Youtube