Ayer impartí este taller en la sede del Ceicid.
Si me llegan a decir hace pocos años que daría clases sobre mantenimiento y arreglos, no me lo hubiera creído. Los destornilladores y demás herramientas me daban mucha pereza.
Pero con la crisis empecé a pensar que se podía ahorrar dinero intentando reparar desperfectos en casa, sin tener que llamar a un técnico. Entonces alguien me habló del Taller de intercambio de tareas organizado por el Ayuntamiento de Pamplona. Las plazas se adjudican mediante sorteo porque están muy solicitadas. Y tuve la suerte de que me tocara. Puedo decir que hay un antes y un después en mi vida después de este taller.
A las mujeres nos enseñaban bricolaje, fontanería y electricidad. Y las clases las impartía Juanjo Iriarte, un hombre muy simpático, que sabe muchísimo y enseña muy bien. Estaba todo preparado de una manera muy profesional. Cada una teníamos nuestra caja de herramientas. Aprendimos a montar y desmontar lavabos, inodoros, arreglar persianas, enchufes, usar el taladro…
Produce una gran satisfacción conseguir arreglar cosas en casa. Tanto que me ha ido picando el gusanillo de la curiosidad y me encanta ver vídeos sobre este tema y pasearme por ferreterías o centros comerciales como Leroy Merlín.
Hace tres años me pidieron impartir un taller de mantenimiento en el Ceicid. Y parece que gustó porque lo sigo dando.
Primero les pongo una presentación con información sobre bricolaje, fontanería y electricidad a través de blogs y vídeos. Y luego hacemos un taller práctico en el que aprenden varias cosas muy sencillas:
Usar el taladro.
Cambiar clavijas de enchufe.
Montar la tubería de un lavabo, arreglar una cisterna y cambiar el filtro de un grifo.
Usar destornilladores eléctricos para desmontar pequeños electrodomésticos.
Cada día disfruto más enseñando estas tareas y sigo aprendiendo. Me queda muchísimo por saber.