Seguro que muchas veces le ponéis fruta para el cole y vuelve con el táper lleno. Una solución que puede ayudar a hacer que los niños coman fruta es convertir la fruta en algo apetecible y divertido. ¿Cómo hacemos eso? Pues es muy sencillo, solo tenemos que dejar 'volar' nuestra imaginación y jugar con la presentación, convirtiendo los trozos de fruta en cosas originales y llamativas para los niños.
Por ejemplo, la manzana es una fruta muy fácil de manejar y de transformar. Apenas con la ayuda de un cuchillo podréis realizar cosas tan curiosas como estas:
Huellas, sombrillas, setas.. Muchas son las formas que se pueden hacer con un simple trozo de manzana.. Además, como veis en la fotografía, podéis acompañarlas con otras formas hechas con pan de molde. ¡Vuestros hijos estarán encantados!
¿Qué os parece? ¿Os animáis a hacerlo y a enseñarnos vuestra 'obra de arte'?
Fuente: Cute food for kids