+3 Purés de Acompañamiento ¡Fáciles y Deliciosos!

El puré de patata es sumamente sabroso, pero ¿has probado a servirlo como acompañamiento de otros platos? Es un excelente opción como guarnición de recetas de carne o pescado. Atrévete a probar combinaciones más originales.

Por ejemplo, un puré de manzana va muy bien con asados y uno de lentejas combinará a las mil maravillas con carnes de caza. De este modo conseguirás, además, que los más pequeños tomen alimentos que no suelen consumir; por lo que este tipo de recetas son ideales para acompañar comidas y cenas para niños.

De legumbres, verduras o manzana

Puré acompañamiento
Purés de acompañamiento
El puré de manzana como guarnición es una propuesta muy sabrosa y fácil de preparar. Resulta mucho más saludable que la mayoría de salsas y, además, su sabor dulce logra un contraste exquisito y sorprendente con la carne. Las manzanas aportan al plato una buena dosis de fibra, necesaria para regular el tránsito intestinal, además de vitaminas y sustancias antioxidantes.

Las verduras son otro clásico de los purés: a los tradicionales de patata y zanahoria puedes sumar acelga, cebolla, calabacín, nabo, puerro, judías verdes, espinacas… Pero si los vas a servir como guarnición atrévete con la calabaza, los guisantes o la remolacha. Además de todo el contenido nutricional y muy pocas calorías, darán una nota de color a la receta.

Puedes servir un puré de lentejas o garbanzos como plato único acompañado de un bistec o una pechuga de pollo a la plancha.

Si lo vas a incluir como acompañamiento de otro plato, el puré tiene su secreto: la clave está en su consistencia, siendo la textura ideal más bien espesa. Pásalo igualmente por el pasapurés para que quede fino y sin grumos.

Recetas de purés para acompañar

Recetas de purés para acompañar
Recetas de purés para acompañar

De guisantes, para el pescado

Ingredientes:

2 cebollas

300 g de guisantes congelados

Unas hojas de menta fresca

400 ml de caldo de ave o pescado

50 g de apio

1 calabacín

Aceite de oliva virgen extra
Elaboración:

Pera las cebollas y pícalas. Rehógalas en aceite de oliva hasta que estén transparentes.

Pasa los guisantes por agua para quitarles la escarcha.

Añade el caldo, el apio, el calabacín, los guisantes y las hojas de menta. Deja cocer hasta que las verduras estén tiernas.

Tritúralo todo hasta obtener una crema espesa.

Coloca la crema de guisantes en el centro del plato, y pon encima unos lomos del pescado que prefieras (bacalao o salmón, por ejemplo) y que habrás cocinado antes a la plancha.

Sirve inmediatamente

Puré de castaña

Ingredientes:

500 g de castañas

400 ml de leche

50 g de mantequilla
Elaboración:

Asa las castañas en el horno unos 8 minutos. Retíralas y después pélalas.

Ponlas en una cazuela y cúbrelas con la leche. Deja cocer hasta que las castañas estén bien tiernas.

Incorpora la mantequilla y pásalo todo por la batidora.

Puré de manzana, para los asados de carne

Ingredientes:

40 manzanas reineta

1 cucharada de zumo de limón

75 g de azúcar

Agua
Elaboración:

Pela y corta las manzanas desechando el corazón.

Riégalas con una cucharada de zumo de limón para que no se ennegrezcan.

Pon el azúcar en una cazuela con un poco de agua y cuando empiece a tomar color, añade las manzanas troceadas.

Vierte agua hasta cubrir las manzanas, tapa y deja cocer a fuego moderado 30 minutos. Ve destapando de vez en cuando y, si fuera necesario, añade más agua.

Poco antes de que finalice la cocción, destapa la cazuela para que se evapore todo el líquido. Pasa las manzanas por el pasapurés hasta obtener una crema más bien espesa.

Cómo cocinarlos correctamente

Recetas de purés para acompañar carnes y pescados
Cómo cocinar los purés de acompañamiento
Tanto o más importante que escoger productos de calidad es cómo los manipulas: si los pelas o no, el método de cocción…

Cocciones rápidas. Las vitaminas se conservan mejor con temperaturas elevadas durante poco tiempo que con temperaturas más bajas durante un periodo de cocción largo.

Aprovecha el líquido de cocción. Añade la cantidad de agua que necesitarás para triturar las verduras, y al final aprovecha la toda. En este líquido van disueltas sales minerales y vitaminas.

Verduras y frutas con piel. Lava muy bien las verduras, pero no las dejes en remojo porque perderían nutrientes. Además, algunas como la zanahoria, el nabo o el calabacín no necesitan pelarse. En su piel se concentran varias vitaminas y te aportan fibra, al igual que ocurre con las frutas. En cualquier caso, siempre es recomendable acudir a vegetales ecológicos, libres de pesticidas y otras sustancias perjudiciales para la salud. Personalmente os recomiendo las cajas de temporada de Natural Gourmet, son ecológicas y están razonablemente bien de precio.
Sírvelos recién hechos. No lo prepares con mucha antelación ni lo mantengas caliente durante horas, porque entonces también perdería propiedades. Una vez listo, puedes añadirle aceite de oliva virgen extra en crudo.

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