A pesar de que lo normal es que a lo niños no les guste mucho el pescado, numerosos estudios demuestran que es un alimento vital para su salud. Principalmente, lo que diferencia el pescado de otros alimentos ricos en proteína es la composición de su materia grasa, rica en omega 3.
El omega 3 es muy necesario para el desarrollo del cerebro y de la vista de nuestros hijos. Es muy importante el aporte de este nutriente durante los primeros años de nuestro pequeño y sobre todo durante los meses posteriores a su nacimiento, por lo que se recomienda que la madre cuente con reservas para poder proporcionar al bebé la cantidad adecuada durante la lactancia.
¿Cuándo podemos introducir el pescado en la comida de nuestros hijos? A pesar de que antiguamente lo recomendable era esperar al primer año de vida, actualmente ha quedado demostrado que se puede introducir perfectamente a los ocho meses. Incluso les beneficia para reducir el riesgo de alergia. Primero empezaremos con los potitos para pasar al pescado fresco blanco o congelado y por último al pescado azul (18 meses).
¿Le das pescado ya a tus hijos?
Imagen: La Lince/flickr