Ayer sábado tuve la suerte de poder compartir un taller de Disciplina Positiva con padres y madres en Tiana, Barcelona. Fue un taller cortito de dos horas y media y nos faltó tiempo para ampliar información, compartir y resolver dudas ¡y es que se pasan tan pronto los talleres!
Fue una experiencia enriquecedora que pude compartir con madres, padres y abuelas y en la que estuve acompañada de dos compañeras de Disciplina Positiva: Judit Teixidor y Itziar Moreira. Para mi ha sido un privilegio poder aprender de ellas.
En el taller de ayer nos enfocamos en el establecimiento de límites y la gestión de las rabietas, y descubrimos algunas herramientas muy útiles para ello. Nos dimos cuenta de que cada familia tiene sus propios límites y que en todos los casos "eso está bien". Tan solo los límites que tienen que ver con el peligro físico del niño o la niña o de los demás y el respeto por las situaciones y las personas son iguales en todas las casas. Y es que el respeto mutuo es uno de los principios de la disciplina positiva y la base de la educación.
También conocimos a fondo el significado del principio Adleriano de amabilidad y firmeza al mismo tiempo y vimos los beneficios de aplicarlo, ya que manteniendo la firmeza en el cumplimiento de nuestros límites y la amabilidad, logramos enfocarnos en los aspectos positivos de ambos estilos de crianza.
Quiero dar las gracias a Carol del grupo de crianza Criansana por acoger el taller y llevar a cabo su organización, puesto que sin su trabajo no hubiese sido posible realizarlo.
Así que feliz estoy de poder realizar estos talleres y de tener previsto continuar haciéndolos. No te puedo contar mucho pero te adelanto que en Junio voy tener la suerte de impartir dos talleres más, pero no serán en Barcelona..... El miércoles te lo cuento todo todo, prometido.
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