¿Celebráis Halloween? Sinceramente, yo no. Pero estoy empezando a mentalizarme para cuando Txikicute quiera disfrazarse de zombie. De momento, he intentado que la fiesta de Halloween me gane por el estómago y va por buen camino. En lugar de llenar la casa de calabazas, he decidido comérmelas. El resultado, un Bundt Cake de calabaza y chocolate con sabor a otoño, a mantita, sofá y canela. ¿Vamos con la receta?
INGREDIENTES
3 huevos
300 gr. de calabaza
2 cucharaditas (teaspoon) de canela
1"5 cucharadita (teaspoon) de levadura
150 gr. de chocolate negro para postres
Ponéis los huevos con cáscara y todo en la balanza y el peso que os marque será la cantidad que tenéis que utilizar de:
Mantequilla
Harina de repostería
Azúcar moreno
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Aprovechando este bundt cake de calabaza y chocolate, hoy os voy a dar el truco del almendruco para que las proporciones de ingredientes sean perfectas a la hora de hacer un bizcocho. Me lo chivó una compañera de trabajo y estoy por hacerle la ola cada vez que la veo. Sólo hay que pesar los huevos que vayamos a utilizar. Para un bizcocho de tamaño normal serán 3 o 4.
Ponéis los huevos en la balanza. Por supuesto enteros, con cáscara y todo. Ese peso es el que marca la medida a utilizar de harina, mantequilla y azúcar. Normalmente, 3 huevos pesan entorno a 220 gramos. Pues si vuestros tres huevos pesaran 220, tendríamos que utilizar 220 de harina, otro tanto de azúcar y lo mismo de mantequilla.
Esto elimina de un plumazo un problema: en el mercado hay huevos de muchos tamaños y muchas veces, al seguir una receta, nos pasamos de huevo o nos quedamos cortos porque no estamos utilizando huevos del mismo tamaño que el autor. ¿Me he explicado bien? No me enrollo más. Vamos con nuestro bundt cake.
Dos horas antes de empezar a preparar el bizcocho debemos hacer lo siguiente:
Cocer la calabaza limpia de pepitas. Cuando esté blanda, retiramos el agua de cocción y hacemos un puré con la calabaza. Lo dejamos enfriar.
Sacar de la nevera la mantequilla y los huevos para que estén a temperatura ambiente en el momento de la preparación.
Trocear el chocolate y derretirlo al baño maría.
Engrasar el molde que vayáis a utilizar para el bundt cake.
Cuando vayáis a empezar a hacer el bizcocho, encended el horno a 160 grados con calor arriba y abajo. Así os aseguráis de que esté a la temperatura indicada cuando vayáis a meter la masa.
En un bol, empezáis a batir la mantequilla. Cuando esté cremosa, vais incorporando el azúcar moreno y cuando esté integrado, añadís los huevos de uno en uno. Ahora vamos a echar la levadura y la canela.
Cuando la masa sea de nuevo homogénea, echáis la mitad de la harina. A continuación, la calabaza y, por fin, la otra mitad de la harina.
Y diréis: "En la foto veo zonas del bundt cake que son de chocolate". Para conseguir esto, vamos a retirar un tercio de la masa a otro bol y ahí vamos a incorporar el chocolate. Luego es cuestión de hacer una base en el molde con la masa sencilla y sobre ella, ir repartiendo cucharadas de la masa chocolateada. Así obtendremos un bizcocho con dos sabores.
El resultado es un bizcocho super blandito y jugoso. La calabaza le da una textura increíble. ¿Lo habéis probado alguna vez?