El protagonista de este puñado de cuentos, el legendario Nasrudín, encarna la figura del sabio loco que desconcierta por su conducta espontánea y desinhibida, similar a la de un niño. Sin embargo, las historias de Nasrudín son un ejemplo inmejorable del poder transformador del humor. En ocasiones parece que el sabio loco Nasrudín suelta barbaridades, pero todo lo que dice hace reflexionar.
Su espontaneidad para hablarnos de la vida con cualquier pretexto constituye una oportunidad única para que niños y adultos se rían y piensen juntos con las ocurrencias de este sabio loco.
Los mini cuentos del sabio loco Nasrudín que se recogen en este libro tan bonico son los siguientes:
Nasrudín y las llaves: muestra que no es cierto del todo eso de que quien busca, encuentra, que hay que saber buscar para poder encontrar lo que uno quiere. Muchas veces buscamos la solución a los problemas sin esforzarnos mucho por ello.
Nasrudín y la pesca imaginaria: enseña cómo, en la mayoría de las ocasiones, nos dejamos guiar por las apariencias y juzgamos a la ligera, y como esto puede hacer que nos llevemos más de una sorpresa.
Nasrudín, la luna y el sol: recalca que los polos opuestos son complementarios de la realidad y que proporcionan el sentido a la vida.
Nasrudín, las encinas y los melones: muestra que la naturaleza es como un libro abierto de inagotable enseñanza.
Nasrudín y las dos espadas: enseña a los peques que cuando no sabemos cómo utilizar algo es como si no lo tuviésemos.
Nasrudín y el avaro que no sabía nadar: alude a que cuando en nuestro interior tenemos un hábito a una mala costumbre arraigada, ni en las peores circunstancias podemos deshacernos de ello.
Nasrudín y los tigres: muestra cómo, en ocasiones, nuestros temores más profundos, carecen de realidad porque solemos dar por real lo que no lo es.
Nasrudín y los colicorpios: trasmite que la vida está repleta de incógnitas y de cosas inesperadas que solo descubren los más atrevidos.
Nasrudín y el secreto de la felicidad: enseña que la vida consiste en caer y levantarse, volver a caer y levantarse de nuevo, y así sucesivamente. Porque lo importante son nuestras reacciones no las circunstancias.
Nasrudín y las habladurías de la gente: muestra que no se puede contentar nunca a todo el mundo, ni aunque lo intentemos. Al final lo que importa es la imagen que tenemos de nosotros mismos, no la que los demás tienen de nosotros.
Todos ellos esconden una enseñanza diferente que hace reflexionar a pequeños y mayores. La edad recomendada para su lectura es a partir de 7 años.
Las ilustraciones son una maravilla, hablan por sí solas. Están repletas de colores vivos (a cuál más bonito), y nos transportan a un entorno fascinante.
Cada uno de los dibujos que conforman las ilustraciones hace el cuento más bonito aún. Sin dudar destaco la belleza, la delicadeza, el colorido y la técnica de dibujo empleada.
Como asegura la directora de Pequeño Fragmenta:
“un buen libro infantil es también un buen libro para los adultos, porque es capaz de emocionar, de transformar y de interpelar”.
Y este, sin duda alguna, es uno de ellos.
Además incluye una GUÍA DE LECTURA para ir más a fondo con cada cuento, que ayuda a comprobar cuánta verdad encierran sus palabras.
Título: Historias de Nasrudín.
Autor: Halil Bárcena
Ilustraciones: Mariona Cabassa.
Colección: Pequeño Fragmenta
Núm. de páginas: 40
Encuadernación: cartoné
Medidas: 28 x 24 cm
A partir de: 7 años
¡ESPERO QUE OS HAYA GUSTADO!
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