Por muchos años se mantuvo la recomendación de retrasar la introducción de ciertos alimentos para proteger así al bebe de desarrollar alergia al mismo. Pero, tras numerosas investigaciones y revisiones científicas, se ha concluido que esta práctica no ha logrado contribuir a la disminución significativa de los casos de alergia en niños, por lo que cada día se aconseja menos.
Esta falta de evidencia para retrasar la introducción de los lácteos (queso y yogur), el huevo, el gluten, el pescado (evitar los de gran tamaño por el aporte de mercurio), los frutos secos o los cítricos más allá de los 6 meses en niños sin antecedentes de alergias, ha ocasionado que asociaciones como la Academia Americana de Pediatría o la Sociedad Europea de Gastroenterología, Hepatología y Nutrición Pediátrica (ESPGHAN) modificaran sus recomendaciones acerca de la introducción de alimentos y acordasen que no se sugerirá a las madres que eviten estos alimentos ni en el embarazo, ni en la lactancia, ni en los primeros meses de alimentación complementaria.
En la actualidad se están llevando a cabo estudios que sugieren que la introducción más temprana que tardía (a partir de los 6 meses en lugar de a partir del año) de algunos de éstos alimentos, puede favorecer el desarrollo de tolerancia inmunológica y prevenir la aparición de alergias, pero aún no se dispone de datos concluyentes al respecto.
Mientras los investigadores siguen trabajando, compartimos algunos consejos que pueden resultar de utilidad si estas embarazada o acabas de ser madre:
– La leche materna es el mejor alimento para el bebé, ya que además de aportarle muchos otros beneficios lo protege del desarrollo de alergias a través de varios mecanismos: contiene oligosacáridos que promueven la diversidad de la flora intestinal, contiene antígenos alimentarios intactos de la madre (sensibilizan), contribuye a la modulación inmune temprana así como al desarrollo de tolerancia y protege de la colonización intestinal de la bacteria ClostridiumDifficile.
– Fumar durante el embarazo puede predisponer al desarrollo de alergias en el bebé (entre otras enfermedades).
– Al introducir un alimento, esperar entre 3 y 5 días para ofrecer un nuevo alimento. De esta manera, si se desencadena una reacción, seremos capaces de identificar el alérgeno responsable.
– Si observas alguna reacción desfavorable tras introducir algún nuevo alimento, retira ese alimento y consulta a tu pediatra.
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