El primer día que se subió al coche, en casa, no era capaz ni de arrancarlo, ya no digamos el tema de meter las marchas, sin dudarlo me dijo "estoy pensando que le voy a decir al de la autoescuela, que a mí eso de ponerme en el coche directamente a la carretera va a ser que no, que me lleve primero a un sitio cerrado donde no corra peligro nadie".
Así que ahí andamos, con el teórico aprobado pero dudando de su capacidad (ella, no yo) de conducir un coche.
Al regreso de sus vacaciones una de mis cuñadas, madrina de LaMediana, se encontró con que volvía de vacaciones y la auxiliar de la clínica (clínica dental) estaba de baja, como todavía no han comenzado las clases, no lo dudó un momento y la llamó para ver si podía ir con ella a la clínica a hacer labores de secretaría, abrir la puerta, coger teléfono, etc., lo que se dice echarle una mano mientras ella estaba con los pacientes. No lo dudó un momento, ella lo vió como una manera de echar una mano a su tía y así poder decir que había trabajado, nosotros como la mejor manera de tener un primer contacto con la vida laboral. Así que el lunes a las 9.30 de la mañana comenzaba su nueva etapa en el mundo laboral, su tía desde el sábado al lunes debió pensarlo mejor, así que no sólo iba a coger teléfono y abrir puertas, sino que aprovechando que tenían un par de horas "libres" antes de que llegase el primer paciente le dió unas nociones básicas para que ejerciese de auxiliar en la consulta. Tras un par de días en la clínica mi cuñada nos dijo que estaba encantada con ella, que la ayudaba un montón en la consulta y hasta le preparaba presupuestos!!! LaMediana estaba encantada, le gustó el trabajo y le enseñó a gestionar una clínica, como ella dijo "ahora sé cómo tengo que hacer si algún día monto mi propia consulta"
El próximo martes comienza las clases y la auxiliar titular se incorpora ya a su trabajo, así que de momento esa experiencia se acaba.