Cuando recibimos la noticia ¡estas embarazada! Que alegría para aquella pareja que deseaba tanto a este bebé, los primeros tres meses a pesar de sentir en muchas ocasiones fatiga, náuseas y otros malestares, son los meses en que más feliz nos sentimos con la noticia, nos sentimos lindas, queremos que nos mimen, de igual manera nuestra pareja se siente feliz y nos quiere complacer en todo, la relación se fortalece en estos tres primeros meses por el simple hecho de que acaban de saber que serán padres y aún no se lo han creído del todo.
Durante este período las relaciones sexuales es muy probable que estén muy bien, mucho amor. Cuando entramos en el segundo trimestre la barriga ya está creciendo, nos sentimos más cansadas que antes y todos los cambios que ha sufrido nuestro cuerpo hacen que se pierda mucho del deseo sexual. Si estas en esta situación o estuviste no debes preocuparte nos pasa a todas. En este artículo explicaremos mejor porqué se afectan las relaciones íntimas durante y después del embarazo.
¿Por qué se afecta la relación sexual durante y después del embarazo?
Primeramente debemos tener en cuenta que nuestro cuerpo durante el embarazo sufre muchos cambios hormonales, además de los cambios físicos. Nos agotamos con facilidad y sentimos más necesidad de dormir que anteriormente. Otro punto que nos lleva a evitar tener relaciones durante el embarazo es que desconocemos qué podemos y qué no podemos hacer en estos nueve meses y pensamos muchas veces que las relaciones sexuales afectarán al bebé de alguna manera por tanto tratamos de evitarlo. Estas dudas nos surgen tanto a mujeres como a hombres, en ocasiones es el hombre quien tiene temor de que le pase algo al bebé y no quiere tener relaciones con su pareja.
En el caso pos parto, es decir luego de dar a luz, luego de terminar el período de reposo sexual que normalmente debemos tener, aún no nos sentimos preparadas para retomar nuestra vida sexual como lo hacíamos antes, esto se debe en primer lugar al temor que sentimos de sentir dolor en la herida en caso de que haya sido una cesárea o simplemente nos hayan tenido que cortar para ayudar al bebé a nacer, no sabemos si nos dolerá, si todavía esa herida no está totalmente sana. Por otra parte está el cansancio que sentimos al tener que amamantar día y noche a nuestro hijo, las malas noches. Todos estos factores hacen que se haga muy difícil volver a la vida de pareja que solíamos tener antes de la llegada del bebé. Ya que el mismo llegó y revolucionó todos nuestros hábitos de vida, ya no somos solo nosotros como pareja, ahora somos nosotros como padres y debemos saber qué hacer ante esta nueva vida.
¿Qué podemos hacer para mejorar la relación íntima tras la llegada de un bebé?
Lo más importante que debe existir para mejorar esta situación es confianza y diálogo, la pareja debe sentarse y explicar lo que le pasa a cada uno en relación a las relaciones sexuales. En el caso de la mujer debemos poner voluntad y estar confiadas de que nuestro cuerpo ya está listo nuevamente para volver a su vida de pareja normalmente. Esto nos ayuda también a sentirnos mejor después de tanto estrés que posiblemente viviremos los primeros meses de la llegada del bebé. Para retomar nuevamente la vida sexual se necesita que ambas partes den muestra de cariño, que se tengan mucha paciencia.
Es posible que durante el período que la madre se encuentre dando pecho y aún no haya vuelto a menstruar tenga un poco de reseques a la hora de tener relaciones, esto es absolutamente normal, por lo que es aconsejable el uso de algún lubricante o aceite que nos permita tener una relación más placentera. Si luego de dar a luz tenemos dolor durante las relaciones sexuales debemos acudir a un especialista, muchas veces se debe a un problema físico del mismo parto a psicológico por el temor de quedar nuevamente embarazad o de sentir algún dolor al lastimarse, de cualquier forma es mejor salir de dudas asistiendo al ginecólogo.
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