Tomo prestado el título del maravilloso poema de Victoria Santacruz “Me gritaron negra” y lo modifico levemente para el artículo que hoy voy a compartir contigo.
Hoy te voy a proponer que hagas este ejercicio conmigo. Tu hija de seis años llega del cole y está más callada de lo habitual. Le preguntas cómo ha ido la salida cultural de la mañana, qué tal ha pasado la tarde con las manualidades, y todo lo que obtienes por respuesta son murmullos. Parece distraída. No, no está distraída. La ves alicaída y desanimada.
Cuando te acercas a preguntarle qué le pasa, niega con la cabeza dando a entender que no le pasa nada; pero cuidas de ella, la conoces, y sabes que te está ocultando algo, así que insistes. Le vuelves a preguntar si ha ocurrido algo y, como ella vuelve a negar con la cabeza, empiezas a preocuparte, así que lanzas la batería de preguntas. ¿Alguna profe la ha reñido? ¿Le han puntuado mal algún trabajo? ¿Se ha peleado con algún o alguna compa de clase? Tras la última pregunta, se inicia un llanto silencioso. Ahora ya sí que entras en estado de alarma total.
Insistes e insistes hasta que tu pequeña solloza que se han burlado de ella y le han gritado “negra”. Y ahí, en ese momento, se para tu mundo. Tiene seis años y por primera vez os estáis enfrentando a esto. Hasta el momento todo había estado bien, pero ahora ha aparecido el racismo en la escena.
A partir de aquí, se pueden abrir diferentes escenarios. Puede ser que ya fueras consciente de que el momento de la primera agresión verbal podía llegar, pero también puede que no lo fueras. Tal vez pensabas que el día en que se diese esa primera agresión, tú estarías cerca para frenarla. ¿Pero cómo proteges a tu hija si no estás cerca?
Es importante que te prepares para ese momento porque, y siento ser aguafiestas, la primera agresión llegará. Y, tanto si estás con tu peque como si no, lo enfrentaréis mejor si tú dispones de las herramientas para acompañar a tu hija cuando el entorno haya sido hostil.
Con la intención de que cuentes con recursos que te permitan gestionar esa primera vez que agredan verbalmente a tu peque (y todas las que vendrán después, porque vendrán), te ofrezco mi nueva formación, el taller “Maternidades racializadas”. Con este curso serás capaz, por un lado, de acompañarle en su crecimiento mientras se suceden estas situaciones, y de dotarle de las herramientas para que sepa capaz de enfrentarlas, tanto si estás presente como si no.
El taller empezará el próximo 7 de octubre y se desarrollará en cuatro sesiones durante las que hablaremos sobre temas que nos conviene tener en cuenta criando a peques afrodescendientes:
recursos para gestionar situaciones de discriminación
estrategias y herramientas para personas adultas y peques
referentes y otras influencias alternativas
La crianza antirracista es fundamental para nuestras familias, ya que nos permitirá acompañar a nuestres peques en su desarrollo, fortaleciéndoles y dándoles autonomía para sostener el racismo cotidiano.
Si tú crías a peques racializades, este taller es para ti, independientemente de si eres una persona racializada o no. El objetivo es que sepamos qué estrategias necesitamos implementar para llevar a cabo una crianza consciente de las necesidades a nivel de identidad de nuestres peques, de forma que podamos integrar las particularidades que implica para nuestras e hijos afrodescendientes.
Si quieres más información sobre el taller, pincha en este enlace y si, además, tienes alguna duda, estoy a tu disposición para resolverlas.
Fuente: este post proviene de Diario de la negra flor, donde puedes consultar el contenido original.
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